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¿Tu estilo de relación es pasivo, agresivo y asertivo?

El estilo relacional

Interactuar y comunicarse con los demás es una habilidad muy compleja. A menudo puede crear malentendidos, ponernos en dificultades o incluso llevarnos a situaciones desagradables y dolorosas. Pensemos en todos esos malentendidos y tensiones que vivimos a diario con familiares, compañeros o amigos por nuestra o su manera de “relacionarnos”.

No es casualidad que el escritor Mario Andrea Rigoni escribiera que «vivir con los demás es un arte cuya dificultad se supera sólo viviendo con uno mismo». Cada uno de nosotros reacciona a los eventos y situaciones de diferentes maneras, que se pueden clasificar en tres estilos relacionales principales en función de nuestra experiencia, experiencia y carácter :

  1. pasivo
  2. agresivo
  3. asertivo

Si bien nuestras reacciones varían según el contexto y los interlocutores con los que nos enfrentamos, cada uno de nosotros tiende hacia un determinado estilo relacional o tiende a adoptarlo en determinadas circunstancias externas o internas.

Entonces, tratemos de averiguar juntos qué «etiqueta» poner a la manera de relacionarse con los demás, investigando las características distintivas de estos tres perfiles relacionales.

Estilo relacional pasivo

Quién es el pasivo y cómo se comporta en las relaciones

Para entender más, trata de responder a esta pregunta: «¿Alguna vez quisiste decir algo, pero no tuviste el coraje?»

Si la respuesta es sí, y te ha pasado varias veces, probablemente tu Estilo de comunicación interpersonal sea “pasivo”.

Parece que hay una baja autoestima detrás de este comportamiento . De hecho, estas personas, al no respetarse plenamente a sí mismas , tampoco pueden hacerse respetar por los demás: difícilmente toman su propia posición (y si la tienen, la mantienen bien escondida), ya que no soportan la comparación . como inseguro.

Siempre siguen a la «manada» y son fáciles de manipular.

En otras palabras, sufren la vida en lugar de darle dirección .

Identikit de estilo pasivo

El sujeto pasivo suele ser una persona muy atenta a los demás , por los que se deja influenciar e influenciar , incluso más allá de su propia voluntad.

En términos concretos, tiende a no oponerse cuando es atacado, a dejarlo pasar, incluso demasiado.

Su lema es: «simplemente no discutas» y en nombre de esta «paz», acepta y sufre lo que le imponen los demás.

Características típicas del individuo pasivo

  • Nunca expresa sus opiniones . “Dime, todo me va bien” es la frase que repite con más frecuencia el sujeto pasivo. Su objetivo es obtener la aprobación de todos , evitando hacer hipotéticos enemigos. Detrás de este comportamiento condescendiente hay obviamente una fuerte inseguridad.
  • No reacciona cuando se le trata mal . Para dar una mejor idea, podríamos definir al sujeto pasivo como el clásico «perro con correa» , sin tener reacciones.
  • Se siente culpable durante una discusión . Cuando recibe críticas o discute con alguien, automáticamente cree que está equivocado se siente culpable .
  • A menudo se compromete para evitar conflictos . Las personas pasivas tratan de evitar cualquier forma de confrontación e incluso están dispuestas a hacer compromisos desventajosos.

Consecuencias de un estilo relacional pasivo

El jugador pasivo apenas se defiende y esto puede generar consecuencias como:

  1. Renuncia constante a los propios deseos y, lo que es más grave, a ser uno mismo. De esta forma se devalúa a sí mismo y, no solo, puede inducir el aburrimiento en los demás.
  2. Para ser considerado como de poco valor. Al nunca expresar su opinión, que puede considerar irrelevante o insignificante, de hecho terminará siendo subestimado y menospreciado por los demás .
  3. Ser dado por sentado a los ojos de los demás. Quien está del otro lado espera las respuestas habituales del pasivo y dará por sentada su total disponibilidad en cada ocasión, no estando lo más mínimo interesado en lo que realmente quiere.
  4. Pérdida frecuente de la paciencia. Al comportarse pasivamente durante mucho tiempo, el pasivo puede descontrolarse , comportándose de forma agresiva.
  5. Problemas físicos. Puede somatizar las censuras autoimpuestas en las relaciones, hasta el punto de desarrollar verdaderos trastornos psicosomáticos.

Estilo de relación agresivo.

Quién es el agresivo y cómo se comporta en las relaciones.

Detrás de este comportamiento a menudo parece esconderse una personalidad débil : las personas agresivas siempre están listas para pelear con un cuchillo entre los dientes solo como una cuestión de defensa.

De hecho, tienen miedo a la diversidad y están dispuestos a hacer cualquier cosa para mantener su posición dentro de la sociedad.

A pesar de su intención de mostrar una fuerte autoestima, albergan una fuerte necesidad de aprobación de quienes los rodean.

Ahora echemos un vistazo más de cerca al Estilo Relacional «agresivo».

¿Qué caracteriza a este tipo de perfil?

Identikit del estilo agresivo

La persona agresiva parece estar atenta solo a sus propias necesidades , no le importan los demás, traza el rumbo hacia lo que quiere y barre todo lo que hay en medio, como si no existiera, como si no tuviera derechos. .

Cualquiera que adopte este estilo relacional está en guerra, todo el tiempo. Tiene la costumbre de atacar y «golpear» y espera que los demás hagan lo mismo con él. Precisamente por eso tiende a vivir continuamente en las trincheras , defendiendo lo conquistado y temiendo inconscientemente la llegada de alguien que “podría liderar con más fuerza”.

El sentimiento de culpa ronda constantemente en estas personas y muchas veces actúa de manera inconsciente.

Su lema, «O pesti, o vieni pestato», suena más a una justificación que a un motivo de orgullo.

Características típicas del individuo agresivo

  • Discute con frecuencia con los demás . Es muy crítico con todas las acciones que no encajan en su forma de vida;
  • Pensar que los demás se toman demasiadas libertades y tienen que ser llamados al orden para permanecer en su lugar;
  • Ser tendencialmente egoísta y anteponer siempre las propias necesidades, pisoteando las de los demás;
  • Estar en fuerte competencia con todos (en el sentido negativo de la palabra);
  • Poner a los demás en una mala posición para sobresalir.

Consecuencias de un estilo relacional agresivo

Quizás el agresivo también piense que su propio estilo relacional puede conseguirle lo que quiere. De hecho, sin embargo, a menudo toma una posición de ataque/defensa y esto puede generar consecuencias que socavan el respeto y la confianza mutuos . En este sentido, los demás pueden guardarle rencor y aprender a evitarlo u oponerse a él.

Estilo de relación pasivo-agresivo

Quién es pasivo-agresivo y cómo se comportan en las relaciones

¿Pero el estilo de relación agresivo y pasivo son dos estilos diferentes, entonces? Bueno no. Aunque aparentemente los dos estilos parecen ser opuestos, con frecuencia representan el continuo de una misma actitud: la pasiva-agresiva.

Parece que hay un mecanismo psicológico detrás de esta tendencia, a saber, la falsa creencia de que mostrar la ira de uno directamente es muy dañino  y, por lo tanto, debe evitarse.

El resultado de este mecanismo es que esa ira o agresión se sigue introduciendo en la relación con el otro, pero de forma indirecta, es decir, a través de toda una serie de actitudes particularmente molestas .

Identikit del estilo pasivo-agresivo

¿Alguna vez has conocido a una persona que es amistosa un día e injustificadamente hostil al día siguiente? ¿Tu amigo o familiar tiene la costumbre de estar de acuerdo verbalmente con lo que se les pide, y luego posponer las cosas, sabotear los planes o pretender olvidarlo? ¿O, mientras leen, se encuentran ustedes mismos en una de las formas que acabamos de describir?

Si respondió afirmativamente a cualquiera de estas preguntas, lo más probable es que esté interactuando con una persona pasivo-agresiva o que usted mismo esté participando en un comportamiento pasivo-agresivo.

La agresión pasiva se refiere a una forma de expresar la ira y la hostilidad indirectamente , es decir, lastimando a otros sin aparentemente hacer nada. Algunos simplemente lo llamarían comportamiento astuto.

Lo que el pasivo-agresivo hace alarde de inmediato es este mismo arte de poner en práctica una clara hostilidad recubierta de «terrón de azúcar» . Esto quiere decir que es capaz de dañar simulando afecto , cuando en realidad lo que encubre esta actitud es un deseo expreso de humillar, controlar o ridiculizar .

Consecuencias de un estilo de relación pasivo-agresivo

En todo esto, quien más sufre es precisamente el pasivo-agresivo que, con el tiempo, acaba encontrándose viviendo en una condición de sufrimiento y negatividad que sólo puede anular toda posibilidad de vivir una relación verdaderamente franca y sincera con el otros.

Una relación sana de compartir y respeto.

Estilo relacional asertivo

Quién es asertivo y cómo se comporta en las relaciones

La palabra asertivo proviene del latín “asserere”, o “afirmar”. Por extensión, el adjetivo califica pues a una persona que muestra confianza al sustentar sus opiniones .

No es coincidencia que la asertividad se considere una de las características clave de las personas exitosas : ser asertivo significa ser capaz de comunicar las propias emociones y opiniones de manera clara y efectiva, sin embargo, sin intimidar al otro .

La asertividad es por tanto una actitud mental y emocional que crea una imagen positiva de uno mismo y hacia la vida.

Identikit del estilo asertivo

Una persona asertiva es capaz de expresar lo que piensa, sabe hacerse valer y hacerse respetar. Asertivo es de hecho el que muestra decisión, determinación y resolución.

Ser asertivo significa, por lo tanto, haber encontrado el término medio justo entre las dos polaridades antitéticas que acabamos de describir: la agresividad y la pasividad.

Esto se debe a que la asertividad es ante todo equilibrio , mientras que cada uno de los dos comportamientos tiende al exceso: el agresivo pisotea a los demás y el pasivo se deja pisotear.

De hecho, ninguno de estos dos enfoques representa un modelo ideal para relacionarse efectivamente con los demás.

El asertivo, en cambio, evita dejarse llevar por la corriente descontrolada de los acontecimientos , sino que por el contrario los domina con energía e ingenio, logrando siempre expresar lo mejor de sí mismo y de sus capacidades.

Características típicas del individuo asertivo

Presentamos a continuación las principales características de una comunicación asertiva:

  • Buen nivel de autoestima : la asertividad, de hecho, comunica la confianza que uno tiene en su capacidad de pensar y tomar decisiones;
  • Objetivos claros y precisos ;
  • Aptitud de escucha ;
  • Capacidad de saber decir no , sin sentirse culpable;
  • Capacidad de saber admitir los propios errores ;
  • Capacidad para criticar constructivamente el comportamiento y nunca la persona.

Consejos prácticos para reconocer tu propio estilo relacional

En base a lo dicho, es importante, por tanto, aprender a reconocer el propio estilo relacional , para poder cambiarlo si es necesario.

Para ello, intenta responder a estas preguntas:

  • ¿Expresas tus opiniones o permaneces en silencio?
  • ¿Eres rápido para culpar y juzgar?
  • ¿Sientes que la gente tiene miedo de hablar contigo?
  • ¿Puedes admitir tus errores?
  • ¿Expresa sus deseos y emociones?
  • ¿Expresa sus ideas aunque no estén de acuerdo con las de los demás?

Si la respuesta a estas preguntas es «no», seguramente la asertividad aún no te pertenece. Así que si os consideráis personas con un estilo relacional agresivo o pasivo, como la mayoría de individuos, intentad trabajar, incluso con un psicólogo psicoterapeuta si fuera necesario, pero en todo caso de forma paulatina, sobre vuestra autoestima, fijándoos pequeñas metas a alcanzar . paso a paso paso a paso, para que puedas adoptar un estilo relacional asertivo y que este esté dentro de tus fortalezas.

Cómo adoptar un estilo asertivo

Ya que “¡la asertividad no nace, se hace!”, la buena noticia es que podemos entrenarnos para serlo. Por ejemplo, quitando énfasis a las críticas, evitando evitar los conflictos y aprendiendo a decir no .

Aprende a aceptar las críticas.

Las críticas pueden ser herramientas excepcionales de crecimiento personal , pero pocos de nosotros podemos aceptarlas verdaderamente. Nuestra inseguridad nos obliga a ver las críticas como un ataque a nosotros mismos , más que como una observación de nuestro comportamiento .

Las personas pasivas sufren críticas , cuestionando su ya frágil autoestima.

Las personas agresivas simplemente no los aceptan y los devuelven con un sello de odio adjunto.

Si quieres cambiar tu punto de vista y volverte asertivo , trata de desarrollar habilidades de escucha y aprende a entender las críticas como referidas al comportamiento, más que a tu persona. De esta manera las críticas se convertirán en valiosos indicios que te ayudarán a cambiar tu comportamiento para obtener los resultados que deseas.

Recuerde: los comportamientos se pueden cambiar, las personas no.

Aprende a dominar el conflicto

¿Tú también te anularías o estarías dispuesto a tragar tragos amargos de por vida, para no enfrentarte a una simple polémica?

Ante un conflicto, la gran mayoría de las personas se dejan controlar (individuo pasivo) o pierden el control (individuo agresivo).

Por el contrario, el individuo asertivo es dueño de sí mismo y de la situación .

Esto porque es consciente de que cualquier conflicto, si se gestiona adecuadamente, puede representar una excelente oportunidad de crecimiento .

Así que trata de evitar desestimar los conflictos , como si fueran la principal causa de ruptura de relaciones. Encuentre el coraje para lanzarse de cabeza a una discusión: haga valer sus ideas , con moderación, y compárese constantemente con los demás.

Tu nivel de asertividad se verá afectado positivamente.

Practica decir no

¿Puedes decir que no a las ofertas de otras personas sin sentirte culpable?

Parece extraño, pero suele ser uno de los comportamientos más difíciles de poner en práctica. Esto se debe a que nuestra sociedad nos exige estar siempre disponibles para los demás , porque esto nos permite haberles devuelto un placer . Además, si estamos disponibles, tendremos altas posibilidades de hacer sentir bien al otro y por tanto evitaremos que se aleje de nosotros.

En pocas palabras , no estaremos solos .

Sin embargo, en el otro lado de la moneda, al hacerlo, ¿los demás elegirán pasar el rato con nosotros por lo que somos o por lo que hacemos ? Está bien, puede ser que los verdaderos amigos nos acepten por lo que somos, pero ¿también es cierto que con ellos logramos ser nosotros mismos y en cambio conocidos?

Comportarse como un Yes Man definitivamente no es una actitud asertiva. Para adoptar un estilo relacional asertivo debe estar disponible cuando tenga ganas de hacer algo y evitar hacerlo si no tiene ganas de hacerlo.

Esto se debe a que si decides ayudar a todos, sin distinción, solo quedarás atrapado en estas actividades y ya no tendrás tiempo para ti .

En resumen, eviten considerarse «salvadores del mundo» o enfermeras de la Cruz Roja , ¡traten de delimitar sus límites de acción!

La reacción más fuerte después de decir un «no» es creer que ha defraudado a quienes necesitan ayuda. Pero piensa, si fueras realmente egoísta, ¿no te encontrarías pensando solo en tus necesidades?

Elegir intentar hacer lo que realmente te hace sentir bien, pero sin descuidar tus espacios de vida. De esta forma no serás egoísta, sino que utilizarás el sano egoísmo .



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