¿Alguna vez has tratado de expresar emociones y te cuesta encontrar las palabras para hacerlo? ¿O tal vez tuvo dificultades o se acercó a una persona que tenía dificultades para reconocer sus propias Emociones o las suyas? ¿O te ha pasado alguna vez ver a una persona muy fría y desapegada que casi parece de hielo?

Si te has encontrado en esta situación, lo más probable es que tengas un problema de analfabetismo emocional o alexitimia .

Probablemente, con esta definición, naturalmente pensarás en una persona poco empática o simplemente poco inclinada al afecto y la emoción, en realidad estamos en presencia de mucho más.

Precisamente por estas características, la alexitimia suele ser difícil de entender e identificar.

En este artículo intentaré explicar qué es, en qué casos se manifiesta, sus posibles causas y sobre todo cómo se puede combatir. También descubrirá cómo puede abordarlo para que el impacto no paralice demasiado su vida.

Alexitimia: ¿de qué estamos hablando?

El término alexitimia deriva del griego y está compuesto por las palabras: a- «falta», lexis «palabra» y thymos «emoción» que significa: «falta de palabras para expresar emociones».

Este término es bastante reciente, de hecho se introdujo por primera vez en 1976.

Ya la etimología y el significado del término nos permite comprender lo que queremos decir con esta palabra, es decir, la incapacidad del sujeto para expresar emociones y sentimientos.

El término fue acuñado oficialmente en la década de 1970 por John Nemian y Peter Sifneos, aunque la gente comenzó a hablar y observar esta condición ya en la década de 1950.

Trastornos psicosomáticos

Esta incapacidad para expresar emociones fue reconocida en pacientes psicosomáticos que presentaban patologías físicas evidentes, como asma y eczema, que sin embargo en la tradición psicoanalítica son reconocidas precisamente como patologías psicosomáticas.

Las patologías psicosomáticas son aquellas debidas al dolor y al sufrimiento psíquico que, en ausencia de expresión, se vierten sobre el cuerpo. Es como si el individuo expresara su sufrimiento a través del cuerpo .

Desde entonces ha existido una gran curiosidad por este fenómeno, tanto que en los años setenta se le dio la definición oficial.

Incluso después de este período, este fenómeno ha sido objeto de gran interés, tanto que en el año 2000 Taylor, Bagby y Parker observaron y afirmaron cómo la Alexitimia podría ser un trastorno en la elaboración de los afectos y como tal interfiere en el proceso de auto- regulación y organización de las emociones y sus principales características, como las reacciones fisiológicas.

Aunque suele verse como un trastorno, no encuentra una clasificación real dentro del Manual Diagnóstico de los Trastornos Mentales (DSM). La motivación es simple: aún no se ha logrado una verdadera uniformidad con respecto a la alexitimia.

Para algunos es un trastorno real, pero para muchos otros es más un rasgo de personalidad que, obviamente, puede convertirse en patológico o ser precursor de otros trastornos.

¿Cómo reconocer la alexitimia?

Las personas que tienen esta característica, como se mencionó, parecen más bien frías, desapegadas, poco empáticas. Este es en realidad uno de los rasgos característicos de este trastorno que consiste precisamente en la incapacidad para distinguir y expresar emociones.

Otro elemento característico de este trastorno es la tendencia a un pensamiento y un estilo cognitivo típicamente concretos.

 Las asignaturas, por tanto, se orientan única y exclusivamente a lo que tiene contrapartida en el mundo práctico y real; esto determina a menudo una pobre capacidad imaginativa y también una pobre capacidad de ensoñación.

El individuo con este trastorno o con este rasgo de personalidad tiende por tanto a mostrar dificultad para expresar y describir sus sentimientos, dificultad para distinguir entre sensaciones puramente corporales y sentimientos reales, poca imaginación y pensamiento orientado a cosas prácticas unido a falta de introspección.

Esto puede determinar una excesiva dependencia del Otro o un excesivo conformismo ya que el sujeto, por sí mismo, es incapaz de regularse emocionalmente y siente la necesidad de encomendarse al Otro.

Otra tendencia común es aislarse en exceso y por lo tanto volver a preferir una vida aislada debido a esta falta de capacidad de autorregulación.

En conclusión, los sujetos con rasgos típicos de la alexitimia son personas que, a pesar de parecer muy integradas socialmente, presentan rasgos muy rígidos y, al mismo tiempo, una excesiva impulsividad que les lleva muchas veces a reacciones del todo inadecuadas y que no saben explicar. y para comprobar.

¿Por qué es difícil expresar emociones con palabras?

Como ya se anticipó, la alexitimia es ciertamente un fenómeno complejo tanto de identificar como sobre todo de comprender, tanto que, comúnmente, se tiende a querer simplificarlo como una “ falta de empatía ”. Esto, sin embargo, es incorrecto.

Este fenómeno es complejo porque a lo largo de los años, gracias a las numerosas investigaciones realizadas, se ha observado que se trata de un “trastorno” que en realidad tiene una etiología diferente.

En efecto, se supone que en su determinación intervienen diversos factores: genéticos, neurofisiológicos, intrapsíquicos, pero también patrones de comunicación familiar y factores socioculturales. Veamos más específicamente.

factores neurofisiológicos

A lo largo de los años ha habido diversas investigaciones y teorías neurofisiológicas (Nemiah JC, Freyberger H., Sifneos PE, 1976; MacLean PD, 1952; MacLean Paul D. 1952). quien demostró cómo el hemisferio derecho del cerebro está involucrado principalmente en el procesamiento del comportamiento emocional, mientras que el hemisferio izquierdo está involucrado en la articulación del lenguaje.

En este punto se ha planteado la hipótesis de que la alexitimia se debe a una falta de comunicación entre los dos hemisferios y también a un mal funcionamiento del hemisferio derecho .

Otro elemento, frecuentemente observado en estos sujetos, es la incapacidad de distinguir las sensaciones corporales de las emocionales . Según Paul MacLean (1967, 1984) esta incapacidad se debe a que las emociones son experimentadas por la persona de forma física , a través del cuerpo y sus órganos. Esto obviamente los lleva a esta incapacidad.

Estilo de comunicación

Otro hecho que ciertamente incide en la formación de este trastorno es el estilo de comunicación y apego  entre padres e hijos en los primeros años de vida.

En psicología ahora se sabe, gracias a la contribución de varios autores como Winnicott, que la capacidad de regular las emociones es enseñada y transmitida por la madre.

El propio Winnicott afirmó que solo si la madre es «suficientemente buena» (capaz de comprender y apoyar emocionalmente a su hijo), el niño tendrá un excelente desarrollo psicológico y aprenderá a autorregularse emocionalmente (capacidad de autorregulación).

Esto, entonces, puede ser la clave para el desarrollo del trastorno/rasgo de personalidad.

En una relación padre-hijo altamente autoritaria o, simplemente, en una relación en la que el vínculo de apego presente es el inseguro-evitativo, su desarrollo sería más probable. Esto se debe a que el niño en estos casos no logra desarrollar la capacidad de autorregulación emocional . Por lo tanto no es consciente de sus estados emocionales, ni es capaz de controlarlos.

Esto, como resultado, conduce a una falta de empatía y una incapacidad para sintonizar emocionalmente con los demás.

factores socioculturales

A esto se suman también factores socioculturales .

A partir de un estudio (Pasini A. Delle Chiaie R. Seripa S. Ciani N. 1992; Mattila AK, Keefer KV, Taylor JGe al, 2010) se ha demostrado que los hombres tienden a padecer este trastorno más que las mujeres.

La explicación podría depender precisamente de nuestra cultura que, desde hace años, transmite estereotipos de género. Es una idea común que las mujeres son más propensas a las emociones y la empatía y que, en cambio, los hombres no deben expresar emociones .

Esta cultura ha influido durante años en la educación emocional que reciben hombres y mujeres, determinando su forma de actuar.

¿Cómo combatir la alexitimia?

Tratemos de entender qué se puede hacer realmente en la práctica para combatir este problema.

Lo primero que debe hacer, por lo tanto, es ponerse en contacto con un psicólogo psicoterapeuta que pueda ayudarlo, a través de una intervención profesional específica que se adapte bien a la situación específica.

Se ha observado que la intervención más eficaz para la alexitimia es la psicoterapia breve dirigida a reestructurar la esfera cognitivo-afectiva de la personalidad .

Pero, ¿qué hacer en la vida cotidiana?

Aquí hay algunos consejos útiles.

Analiza situaciones que te crean dificultades

Se ha observado que los alexitímicos tienden a no querer cambiar . Esto hace que estos temas sean muy difíciles de tratar en psicoterapia .

En este sentido es necesario tomar conciencia de lo que se vive en la vida cotidiana .

Por ejemplo, se podrían analizar situaciones en las que se presenten dificultades para expresar las propias emociones.

¿Cuando sucede? ¿Sobre qué tema? ¿En qué situación específica?

Esta podría ser una forma de aprender a abordar los sentimientos y su expresión poco a poco.

Usar el cuerpo para expresar emociones.

Lo que puede hacer para expresar sus emociones y sentimientos es tratar de expresarlos de otras maneras.

Se ha demostrado que las personas con axitimia son más sensibles al contacto físico . En este sentido, el cuerpo puede ser utilizado de manera óptima para expresar lo que se vive y se siente.

Por ejemplo, si no puede poner sentimientos en palabras, puede mostrarlos con un simple trazo.

Esto te ayudará en tu relación con los demás y te ayudará a desafiarte a ti mismo con la parte más emocional de ti mismo.

Más consejos que puedes seguir y quién está a tu lado

Entre otras sugerencias, sigue estas también:

• No te avergüences de llorar o reír. El llanto y la sonrisa son las formas más directas de nuestra expresión emocional.
• Aprovechar la fantasía, ya que es un medio fundamental para imaginar el presente y el futuro.
• Habla con aquellas personas en las que confías, especialmente hablando de tus debilidades. No es bueno guardar todo adentro.
• Escribe, trata de llevar un diario solo para ti. Esto puede fortalecer sus funciones cognitivas y más.
• Si estás tratando con una persona alexitímica, no la culpes, apóyala y sobre todo apréciala.

Deja que te incluya en su mundo y ayúdala para que pueda recibir ayuda a nivel profesional.

Seguido de un cuestionario validado para la medición de la alexitimia .

CAS – Escala de Alexitimia de Toronto 20

GJ TAYLOR, RM Bagby, JDA PARKER, 1992

Siguiendo las instrucciones que se enumeran a continuación, indique qué tan de acuerdo o en desacuerdo está con cada una de las siguientes afirmaciones marcando una X sobre el número correspondiente. Marca una respuesta para cada oración.

Puntaje total

Sume la puntuación de todas las respuestas.

Para un resultado:

• igual o inferior a 51 = ausencia de alexitimia
• entre 52 y 60 = posible alexitimia
• igual o mayor a 61 = alexitimia

Subescaleras

• Subescala que mide la dificultad para describir emociones. (preguntas: 2, 4, 11, 12, 17).
• Subescala que mide la dificultad para identificar emociones (preguntas: 1, 3, 6, 7, 9, 13, 14).
• Subescala que mide la tendencia de los individuos a enfocar su atención hacia el exterior (preguntas: 5, 8, 10, 15, 16, 18, 19, 20)