Después de crear una versión poligonal de la Franquicia, un equipo interno de Konami recibió una tarea compleja, tratar de usar la fórmula de Symphony of the Night para crear un título de lanzamiento para la GBA.

Mi primera Consola portable fue una GBA, antes no tenía disponible el presupuesto para gastar en este tipo de dispositivos y las capacidades técnicas de las mismas no me terminaban de convencer, pero cuando la nueva portable de Nintendo fue anunciada, sus títulos me recordaron de inmediato los de la SNES, que había sido mi consola preferida hasta ese momento, al elegir con que juegos comprarla vi varias opciones interesantes.

Como venía de una generación con pocos juegos de rol en mi consola de mesa, de inmediato Golden Sun llamó mi atención, pero como la idea era traer de USA la consola tocaba aprovechar el pedido y comprar un juego más, así que opté por Circle of the Moon, pues recordaba con cariño Symphony of the Night y este se veía bastante similar en cuanto a estructura y mecánicas; casi me quedo ciego jugándolo, pero lo disfruté bastante.

Los eventos ocurren en 1830, nuestro protagonista es Nathan Graves, cuyos padres murieron hace una década a eliminar a Drácula. Morris Baldwin, quien luchó junto a nuestros padres, nos entrenó para derrotar a Drácula y sus secuaces; también nos eligió como su sucesor, por encima de su hijo Hugh, y nos dio el "Hunter Whip".

Camilla, una secuaz de Drácula, lo revive, pero sin todos sus poderes, sin embargo, antes de que logremos eliminarlo destruye el piso así que Nathan y Hugh, caen por un largo túnel. Hugh deja atrás a Nathan para buscar a su padre y nosotros procedemos a buscarlo también en el castillo pues nos enteramos de que en la próxima luna llena, el alma de Morris se utilizará para devolver a Drácula a todo su poder.

La trama es ligera, con un solo giro que se ve venir desde la introducción y sin muchos elementos para rescatar, hubiera sido entretenido que profundizaran sobre los cambios realizados a la franquicia, pero al final el juego fue removido de la continuidad de la saga, en parte porque no usaron personajes de la familia Belmont y porque el encargado de la franquicia en ese momento no hizo parte ni supervisó esta entrega.

Este fue el primer título de la franquicia para la nueva consola portable de Nintendo y su desarrollo estuvo a cargo de un equipo que no tenía demasiada experiencia, pero que tomó la sabía decisión de basar el diseño de este juego en Symphony of the Night, que ganó mucha popularidad en los años anteriores y que de paso se acomodaba bastante bien a las capacidades 2D de la plataforma.

En este juego nos vamos a encontrar una mezcla de acción y plataformas con varios componentes de rol, así como la necesidad de regresarnos a buscar rutas alternativas a medida que vamos obteniendo habilidades como el doble salto, correr o romper muros. Nuestra arma principal es un látigo y regresan varias armas secundarias de la franquicia como dagas, hachas, cruces y el agua bendita que se usan consumiendo corazones que encontramos por todos los niveles.

A medida que exploramos el castillo nos encontraremos con diferentes áreas y enemigos, varios de los cuales son viejos conocidos de la franquicia, aunque hay mucha variedad, así el diseño general de la zona no tenga mucho sentido arquitectónico, para ayudarnos a navegar nos encontraremos algunos cuartos que nos permiten viajar rápidamente entre ellos, así como otros para salvar nuestro progreso y recuperar toda nuestra energía.

La parte del rol se ve reflejada en que nuestro personaje tiene varias estadísticas como fuerza, inteligencia, defensa, entre otros, que afectan cosas como el daño que se hace o recibe. A medida que eliminamos enemigos recibimos puntos de experiencia y al completar ciertos valores subimos de nivel y nuestros puntajes mejoran, lo que pueden facilitar el progreso en caso de que nos sintamos bloqueados.

Un elemento particular de esta entrega es un sistema de cartas llamado Dual Set-Up System (DSS), el cual nos permite usar hechizos o poderes especiales con nuestra magia, para esto debemos equipar una carta de acción y una de atributo, esto significa que tendremos acceso a 100 poderes diferentes, pero el sistema tiene algunos problemas, el primero de estos es que solo podemos usar una habilidad a la vez.

Otro inconveniente de este sistema es que hay poderes que son muy superiores a los demás, e inevitablemente escogeremos un par de favoritos y no volveremos a mirar los otros; por último, la forma de conseguir las cartas no es sencilla pues son una recompensa rara de algunos enemigos específicos que solo descubriremos con una guía.

Una vez terminemos el juego, tendremos la oportunidad de jugarlo de nuevo con diferentes “clases” de personajes, es decir, con versiones de nuestro protagonista que tienen sus puntajes alterados, así por ejemplo el modo guerrero tiene muchos puntos de fuerza y vitalidad, pero no puede usar las cartas DSS; el mago en cambio empieza con todas las cartas a su disposición, mucha magia e inteligencia, pero muy poca vida; hay 4 configuraciones diferentes para probar.

No sé qué estaban pensando los desarrolladores de este juego o qué tipo de prototipo les facilitó Nintendo, porque este título es simplemente muy oscuro para la versión original de la consola que no contaba con retro-iluminación. Si usamos versiones más recientes u otros medios más modernos notaremos un par de punto positivos y otros negativos.

Hay bastantes enemigos y sus diseños son interesantes, especialmente si nos enfocamos en los jefes, sin embargo, el nivel de sus animaciones deja bastante que desear, los fondos tampoco tienen el nivel esperado para la franquicia, y se nota más cuando se compara con las siguientes entradas en la misma plataforma.

La música es una mezcla de grandes éxitos de la franquicia con un poco de material fresco aquí y allá, aunque técnicamente mejoró bastante con respecto a lo que escuchamos en una consola de 16 bits y se usaron muestras de instrumentos reales la calidad de la misma es inferior a lo que otros juegos del momento nos estaban ofreciendo.

Los otros efectos son los propios de la franquicia, pero reproducidos con mayor claridad gracias al chip de sonido de la consola, definitivamente nos harán sentir nostálgicos sin llegarnos a impresionar y se echa de menos el uso de voces al menos para los momentos claves de la aventura, aunque con la calidad de ese momento, no estoy seguro que sea un punto negativo en su totalidad.

El título fue uno de los mejores títulos de lanzamiento de la consola portable, a pesar de que era difícil apreciar sus gráficos por usar tonos tan oscuros y no contar con una mejor iluminación, la aventura es retadora, el castillo es divertido de explorar y hay bastante contenido por conocer, sin embargo, el sistema de magia no se supo aprovechar, la trama no es llamativa y creo que es el peor de los que estuvo disponible para la consola.

Gracias a su oportuna fecha de salida y el reconocimiento de la franquicia el juego tuvo muy buenas ventas y es el más barato de conseguir de los que salieron para la GBA, afortunadamente Konami decidió recopilar las 3 entregas de esta consola como parte de Castlevania Advance Collection, que se puede conseguir de manera fácil y económica para plataformas más recientes.

Valorado 7/10 combinaciones de cartas