... de las bases Yanquis en Colombia es la propia actitud abiertamente confrontacional del Mueve Jeta. No podemos olvidar que hace pocos meses ordenó una movilización general militar hacia la frontera colombiana. No sucedió nada porque los primeros sorprendidos -después de los colombianos estupefactos- fueron los propios esbirros bolibananos. El ministro de aquel entonces era uno que parecía a Maguila el Gorila, y que, al escuchar el tronar de la voz del (pa)trono se paró firme (1), saludó y asintió ante la orden, ante lo que, en vez de dedicarse a la tarea titánica de comenzar una movilización general militar en contra de Colombia, se volvió a sentar para terminar de escuchar la perorata del masKcoK, que duró algún par de horas mas, campaneando el güisquicito dominical en paz.

Al final se evitó la tragedia de una guerra por la completa ineptitud del Ejército Rojo Bolibanano. Para gritarle lemitas al mofletudo si sirven, y para reprimir viejitas y niños en las calles de las ciudades venezolanas también. Pero esta ineptitud no pasó desapercibida por las potencias regionales y aquellas otras que nunca pensaron que tendrían el tipo de influencia que tienen con el Goriloro a la cabeza de la debacle: China, Irán y Rusia, principalmente. ¿Alguien puede criticar que Colombia se haya protegido de los exhabruptos narco-petro-robolucionarios del discípulo castristas y aliado de las guerrillas marxistas?

Como no hay manera que los pilotos bolibananos puedan enfrentar a los jets yanquis, habrá que hacer como en la guerra de Corea, y pilotarles las naves para crear algún daño y que su reputación no sufra en el mercado armamentista. ¿O habrá que darle una bombita atómica, para que entonces se establezca la hegemonia de la barbarie en la tierra que vió nacer a Miranda, Bello y Sucre? Nosotros no tenemos por qué preocuparnos porque la robolución es tan vergataria que tiene orangutanes entrenados... (3)

salud esclavos (y esclavitas)

Notas

(1) Tanto como se lo permitió la borrachera, la panza y el bigote.
(2) ... y ciudadanas... ¡ufff!
(3) Un abrazo fraternal al recién condecorado con la órden Libertador en su segunda clase Coronel Benavidez. Nunca un orangután logró tanto reiting.

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