Una reciente nota de la revista digital de esta organización dijo lo siguiente: "El activismo feminista cubano pierde a su mujer más fuerte y decidida, Sandra Álvarez, a manos del acoso y las amenazas de un gobierno que les teme a las mujeres verdaderamente feministas que por preservar sus privilegios han reducido el feminismo a palabras sin acciones desde los medios o la academia, olvidando a tantas mujeres cubanas cuyas vidas dependen del feminismo"
People in Need (PIN) como subcontratista de la Fundación Nacional para la Democracia (NED), y de la cual recibe 200 mil dólares para generar el Cambio del panorama mediático en Cuba y un feminismo exclusivo desde el Congreso y Departamento de Estado, había calificado a Sandra Álvarez Ramírez como su mujer más fuerte y decidida en estas lides: interesante y revelador.
Es sabido que la funcionaria encargada de esta tarea en PIN no se nombra Agnes Kolleman, sino Clara González Calvo: una española con residencia en República Checa, quien ha viajado a la Isla para reclutar mercenarios según el dictado de su financista en Washington Aimel Ríos Wong, además de editar la revista digital a la que debemos estas acusaciones y amenazas estúpidas contra el pueblo y gobierno cubanos.
La cultura de Clara González acerca de nuestra historia queda reducida a una simple figurita de la isla de Cuba tatuada en uno de sus antebrazos, pues nada sabe de nuestras mujeres y heroínas como tampoco de las españolas y su tradición de lucha. Agnes Kolleman (como hace llamarse) es una mujer inconforme de su salario en People in Need, y timorata de las supervisiones de la NED a sus programas anticubanos y empleo del dinero canalizado a ella para estos efectos. Sin embargo, figura como paladín de las causas feministas para Venezuela, Nicaragua y Cuba, encubriendo reales propósitos de destruir los procesos revolucionarios en estas naciones.
Sandra Álvarez y su actividad son también protegidas por una especie de Guardia Rural entrenada y capitaneada por Roberto Ariel Lamedo Piñón, un traidor radicado en Miami que usa diversos nombres en las redes sociales para acosar y amenazar a periodistas cubanos (Ariel Pino o Siro Cuartel), aunque lo considero Sirito sin Cuartel o con cuartel en las oficinas de la Agencia Central de Inteligencia en Langley, Virginia en Washington.
Tomado de Facebook
