Muchas de las notorias que se cuentan sobre Steve Jobs son fascinantes, como el curioso autógrafo que envió en una ocasión o cuando presentó un dispositivo guardado en su bolsillo, pero muy pocas historias se centran en su juventud. Y lo cierto es que cuando era niño, Steve Jobs era bastante travieso y era aficionado a las bromas.

Steve nació en San Francisco, el 24 de febrero de 1955. Sus padres biológicos fueron una estudiante de posgrado llamada Joanna Schieble y un profesor asistente sirio llamada Abdulfattah Jandali. Al no poder hacerse cargo de él, Steve fue adoptado por Paul y Clara Jobs,q que siempre habían querido tener un hijo. Y esto fue algo que marcó para siempre a Steve, incuso hasta el punto de hacerle llorar cada vez que escuchaba una canción.

Jobs se aburría en clase de pequeño y gastaba bromas pesadas

Cuando era pequeño, Steve Jobs estudio en la escuela de Monta Loma, que estaba a solo cuatro manzanas de su casa. Allí se hizo amigo de un chico llamado Rick y los dos se pasaron un buen tiempo en el despacho del director y castigados debido a las bromas pesadas que gastaban.

Estaba un poco aburrido durante los primeros años, así que me ocupé de meterme en problemas

Una de esas primeras bromas fue la de colgar varios carteles en la escuela diciendo que al día siguiente se celebraba el "día de trae a tu mascota a la escuela". Eso hizo que al día siguiente decenas de alumnos trajeran a sus mascotas a clase, desatándoselas un autentico caos con perros persiguiendo a gatos por todo el edificio.

En otra ocasión, ambos ambos convencieron a unos cuantos estudiantes de que les dijeran las combinaciones de los candados de sus bicicletas. El resultado fue de nuevo un enorme caos al salir del colegio, con estudiantes que se tuvieron que quedar hasta las 10 de la noche esperando para volver a casa.

Pero ninguna de estas bromas fue tan pesada como el día que Steve Jobs decidió soltar una serpiente en clase y encender un petardo debajo de la silla del profesor. Una de las bromas más peligrosas que el pequeño Steve Jobs cometió en su infancia.

A pesar de que todas estas bromas terminaron con Steve jobs expulsado, sus padres no lo castigaron. Ellos decían que Steve se aburría en el colegio porque laso profesores no le desafiaban lo suficiente, hasta que llego la Sra. Hill en cuarto grado. Según Jobs "aprendió más de ella que cualquier otro profesor" y "si no hubiera sido por ella, estoy seguro de que habría ido a la cárcel".

Aunque lo cierto es que Steve Jobs no dejó de hacer bromas en ningún momento, incluso una de esas bromas termino siendo un negocio ilegal sin el que Apple no hubiera existido. Cosas de genios.

El artículo Steve Jobs era bastante travieso de pequeño y esta es la (peligrosa) broma que hizo en clase fue publicado originalmente en iPadizate.