En febrero del 2017, se presentó la nueva e innovadora tecnología de protección de vidrio, conocida como Miraj Diamond Glass y fabricada por la empresa estadounidense Akhan.

En aquel entonces, la compañía era optimista al esperar que su tecnología se utilizara en teléfonos inteligentes antes de que finalizara el año 2017. Eso aún está por suceder, pero la empresa está actualmente involucrada en una disputa con la tecnología china Huawei. La disputa incluso resultó en que el FBI llevó a cabo una operación encubierta contra el gigante tecnológico chino en el CES 2019.

Resultó que Akhan Semiconductor había entablado conversaciones con Huawei sobre la concesión de licencias de la tecnología al fabricante de teléfonos inteligentes. Akhan afirma que la tecnología es 6 veces más fuerte y 10 veces más resistente a los rasguños que la Gorilla Glass, el estándar de la industria que genera alrededor de 3 mil millones de dólares en ventas anuales para Corning Inc.

De acuerdo a lo que se ha detallado, la firma proporcionó a Samsung y Huawei muestras del vidrio. Una muestra temprana de Miraj Diamond Glass se envió al laboratorio de Huawei en San Diego, pero hubo un acuerdo en que el vaso no se cortaría en dos. Esta es una práctica estándar para evitar cualquier posibilidad de que los ingenieros de la compañía realicen ingeniería inversa en el proceso del vidrio si se corta en dos. Sin embargo, cuando se devolvió el vaso a Akhan, había signos de que el cristal se había cortado en dos y se habían eliminado algunos fragmentos.

Huawei no es un novato en tal acusación de robo de propiedad intelectual. Siempre ha tenido tal toga colgando en su cuello. En 2002, Cisco Systems Inc. acusó a la compañía de robar el código fuente de sus enrutadores. Motorola dijo en una demanda de 2010 que Huawei había convertido con éxito a algunos de sus empleados nacidos en China en informantes. Y en 2012, el Comité de Inteligencia de la Cámara de Estados Unidos calificó a Huawei como una amenaza a la seguridad nacional e instó al gobierno ya las empresas estadounidenses a no comprar sus productos. Huawei negó todas las reclamaciones.

Las demandas de Cisco y Motorola terminaron con acuerdos. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos también sospecha que Huawei está robando secretos comerciales protegidos de T-Mobile, aquellos relacionados con su experiencia con la pantalla táctil que prueban al robot Tappy.

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