El Capital de trabajo es el “combustible” en las empresas que permite afrontar las distintas necesidades de la operativa financiera. Su optimización permite mejorar notoriamente el negocio y su proyección a futuro. Aquí les dejamos varias pautas para lograrlo.

El Capital de trabajo (CT) o “circulante” de las empresas, nos permite financiar la operativa diaria de corto plazo, como la compra de mercaderías, pago de sueldos y cargas sociales, los gastos en servicios públicos, otorgar crédito a los clientes (si esa es nuestra modalidad comercial) y realizar inversiones que permitan innovar o transformar el emprendimiento.

En los mercados actuales, más complejos y segmentados, la necesidad de optimizar el CT es vital, pero si lo logramos también nos ofrece la oportunidad de un mayor y mejor crecimiento y captación de oportunidades rentables.

FUENTES DE FINANCIAMIENTO DEL CT

Existen fuentes tradicionales y no tradicionales de financiamiento para el CT, cada una con sus ventajas y desventajas:

* Financiamiento bancario: suele ser costoso y debe ser utilizado con buena dosis de análisis y previsión.

* Financiamiento de otras instituciones: existen instituciones no bancarias que financian CT para Pyme`s,  generalmente a un costo financiero más bajo, como por ejemplo “República Microfinanzas” o “Fundasol”, entre otras.

* Financiamiento propio, de socios o de la familia: implica “tener” fondos disponibles y la voluntad de hacerlo, asumiendo entonces una deuda con nuestro entorno.

* La llamada “liberación interna de Caja”, o sea conseguir fondos de la propia gestión, es por lejos cuando es posible, la menos costosa y más eficiente para el CT.

QUE REQUIERE UNA GESTION EFICIENTE Y EFECTIVA DEL CT

Si bien la gestión eficiente del CT es la mejor forma de liberar fondos para el mismo, implica tener una estrategia bien diseñada, y un plan concreto y coordinado tanto internamente como con clientes y proveedores.

En ese sentido, conviene formularnos una serie de preguntas para evaluar si estamos gestionando bien el CT:

* De acuerdo a como viene el mercado y mis proyecciones, ¿voy a tener mayor necesidad de “Caja”? o dicho de otra manera, ¿mi CT es suficiente para los compromisos y objetivos que tengo a corto y mediano plazo?

* ¿Tengo claro todas las acciones e instrumentos posibles de utilizar para “liberar caja” a los efectos de aumentar el CT?

* ¿Tengo mi “ciclo de caja” optimizado?

* ¿Consideré las distintas actividades de mi negocio que me pueden requerir más CT?

* Mi organización y procesos operativos, ¿me ayudan a tener una buena gestión del CT?

* Con mi gestión de CT, ¿puedo minimizar problemas y conflictos con proveedores y clientes?

* ¿Tengo Indicadores para medir la gestión, e Incentivos para fomentar la mejora de ella?

* ¿Me he cuidado de evitar uno de los ERRORES capitales, que es sacar recursos del CT para financiar inversiones de largo plazo? (estas deben ser financiadas por instrumentos de largo plazo o aportes de capital para eso).

De las respuestas a estas preguntas podemos deducir dónde tendríamos que mejorar para lograr una gestión más eficiente de CT, que nos vaya dejando más “holgados” y con seguridad financiera.

CONCLUSIONES:

La gestión optimizada del CT es el MEJOR instrumento para fortalecer ese “combustible” imprescindible de todas las empresas, que es el Capital de Trabajo.

A su vez un CT optimizado nos permitirá un manejo fluído del negocio, una mayor seguridad financiera, aprovechar oportunidades comerciales y sobre todo también, bajar el nivel de stress protegiendo nuestra salud.