MUNDO  PREHISTÓRICO

Hace millones de años, el planeta azul que hoy habitamos era muy distinto. Condiciones ambientales y climáticas diferentes a las actuales, facilitaron  una extraordinaria  diversidad biológica.

 Los procesos de presión y calor sobre los restos, favorecieron su mineralización y fosilización.

 Gracias a los vestigios de estos organismos extintos se puede tener una idea aproximada de cómo era el planeta en aquellas lejanas edades.

Se estima que la vida en nuestro mundo, surgió hace 3.800 millones de años.

 En tan vasto lapso, se han sucedido importantes modificaciones, permitiendo el desarrollo de especies, emigración de algunas, extinciones de muchas y adaptaciones de otras. 

Los organismos existentes, fueron equipados para desenvolverse óptimamente en las condiciones de su entorno. 

Cada Era es una etapa del desarrollo de la vida, donde ciertos grupos se impusieron y triunfaron: en el Paleozoico, los peces y los anfibios. 

En el Mesozoico, los reptiles y los dinosaurios. En el Cenozoico, las aves y los mamíferos. 

Tales organismos estuvieron tan bien adaptados  y ligados a su ambiente y clima, que un súbito cambio podía llevarlos a la extinción.

Algunos presentaban formas y aspecto extraños, con estructuras como espinas, placas, escudos, piel escamosa, ojos reptilianos, tamaños descomunales, etc.

Esto se dio (en ciertas especies) en todas las edades: Peces acorazados (Dunkleosteus) de 10 metros, Dinosaurios (Saurópodos) de 80 toneladas, Mamíferos (Indricotherium) de 20 toneladas (sin contar la ballena azul, cetáceo de 130 toneladas).

El 90% de especies animales que han existido, hoy están extintas. Esto se debió a catastróficos fenómenos cósmicos, determinantes de drásticos cambios en el clima y en el ambiente.

La Era Secundaria es la Era de los reptiles, que dominaron todos los ambientes. Los terrestres, los dinosaurios, fueron el grupo dominante en los continentes. Pero otros, fueron diseñados y equipados,  para desenvolverse en medios diferentes: el aéreo y el acuático.

Por presentar caracteres parecidos y haber sido contemporáneos, a veces se les confunde.

Los dinosaurios fueron conformados con miembros debajo de su cuerpo, lo cual facilitaba su desplazamiento en tierra firme. 

En contraste, los  "reptiles marítimos"  los tenían a los lados del cuerpo (proyectados hacia afuera). En los "saurios acuáticos", sus miembros estaban estructurados como "aletas".

 Estos extraños seres, en general, eran "endotérmicos" al contrario de los reptiles actuales, que son ectotermos.

Taxonómicamente, los dinosaurios están separados de los reptiles aéreos y marinos, lo que constituye una importante diferencia en la clasificación.

El llamado Límite K/T se dio hace 65 millones de años. El fenómeno cósmico derivó en catastróficos cambios ambientales y telúricos. Dio término el reinado de  los "Lagartos terribles" que durante 130  millones de años habían sido los vertebrados dominantes. 

Un grupo fascinante, del cual los expertos han identificado unas 1.000 especies.

Desde las primicias de la centuria decimonónica, cuando se clasificaron los primeros fósiles, el número ha ido en aumento: primero 350, luego 500, hasta 1.000 en el presente. No obstante, hay científicos que opinan  que deberían existir unas 700 especies más, que aún permanecerían ignotas, incrustadas en el espesor de la corteza terrestre. 

Los  "Pterosaurios"  fueron los primeros vertebrados en dominar el aire. Sus restos  (cifrados de 220 a 65 millones de años) se han ubicado en todas las masas continentales, particularmente en zonas que representan depósitos acuáticos. De ello se infiere que habitaron ecosistemas acuáticos, con un comportamiento similar al de las actuales aves marinas. 

No fueron dinosaurios, sino "reptiles volantes".  La existencia del  "hueso pteroideo",  que facilitaba el ascenso y descenso en el vuelo, hace pensar que estos peculiares  "lagartos alados"  constituyen un orden de vertebrados con caracteres únicos, que no se presentan en ningún otro.