El Peyote es una planta que produce una droga alucinógena, la mescalina, y se ha utilizado desde hace miles de años por tribus en sus rituales religiosos y de curación. Comparado a veces con en LSD, el subidón que este ocasiona se ha descrito en ocasiones como un sueño.

¿Qué es el peyote?

El peyote es un pequeño cactus sin espinas que contiene compuestos psicoactivos, entre ellos la mescalina. La planta ha sido utilizada durante unos seis mil años por las tribus nativas con fines religiosos y curativos. Tiene un significado espiritual para los nativos americanos, que lo utilizaban como parte de los sacramentos religiosos.

La planta, conocida con los nombres científicos de Lophophora williamsii o Lophophora diffusa, se encuentra en el suroeste de Estados Unidos, el norte de México y Perú. Se sigue utilizando en prácticas religiosas que implican la ingesta de peyote durante ceremonias de oración nocturnas.

El principal ingrediente activo del peyote es la mescalina, un compuesto psicodélico que también puede fabricarse mediante síntesis química.

Los botones del peyote (protuberancias que se encuentran en la parte superior de las plantas de cactus) suelen secarse y luego masticarse. También pueden remojarse y consumirse en forma de líquido (como el té), molerse hasta formar un polvo que puede tomarse en cápsulas, o fumarse con tabaco o cannabis.

Clasificación del peyote como droga

Como sustancia de la Lista I, el peyote se considera una droga ilegal y adictiva en Estados Unidos. Sin embargo, la Ley de Libertad Religiosa de los Indios Americanos (AIRFA) de 1994 otorga a los nativos americanos el derecho legal de utilizar el peyote para sus servicios religiosos.

La exención ha sido un tema continuo y polémico durante años, aunque la jurisprudencia ha determinado que incluso los miembros de la Iglesia Nativa Americana que no tienen ascendencia indígena pueden usar legalmente el peyote en este contexto.

• Clase de droga: El peyote está clasificado como un alucinógeno.
• Efectos secundarios comunes: Se sabe que el peyote provoca náuseas y vómitos, aumento de la temperatura corporal, alucinaciones, alteración de la percepción del espacio y el tiempo, deterioro de la coordinación motora, euforia y ansiedad.

Cómo reconocer el peyote

Los botones de peyote (la «corona» o parte superior del cactus peyote) tienen el aspecto de botones con forma de disco. Pueden ser frescos o secos. La gente puede masticarlos o remojarlos en agua para hacer un líquido embriagador.

Como el peyote tiene un sabor amargo, también se muele en un polvo blanquecino que se coloca dentro de una cápsula para ser ingerido o se espolvorea en un cigarrillo o un porro de marihuana para ser fumado.

Efectos del Peyote

El peyote es un alucinógeno, lo que significa que puede causar profundas distorsiones en las percepciones de la realidad de una persona (conocidas como alucinaciones), incluyendo ver, oír y sentir cosas que parecen reales pero no lo son.

Se cree que los alucinógenos afectan a los circuitos neuronales del cerebro en los que interviene el neurotransmisor serotonina, que desempeña un papel en el estado de ánimo, la percepción sensorial, el sueño, el hambre, la temperatura corporal, el comportamiento sexual y el control muscular.

Los Efectos del peyote (que pueden ir desde un estado trascendental profundamente místico hasta un «mal viaje» y síntomas disfóricos) dependerán de la potencia y la cantidad que se ingiera, así como de las expectativas, el estado de ánimo, el entorno y el historial de salud mental de la persona. Muchas personas describen el subidón como un sueño.

Los efectos suelen intensificarse cuando la droga se combina con sustancias como el alcohol o los estimulantes, que pueden perjudicar la salud mental de la persona.

Timing de los efectos

Las personas pueden empezar a experimentar los efectos de la droga (así como el malestar físico, que incluye náuseas, sudoración y escalofríos) a los 30 minutos de ingerir el peyote. Los efectos pueden durar hasta dos horas antes de alcanzar un pico.

Los efectos alucinógenos del peyote suelen alcanzar su punto álgido alrededor de dos horas después de la ingestión, y disminuyen gradualmente durante las siguientes ocho a doce horas.6

Algunos comparan los picos con los viajes de LSD. Pueden alterar profundamente la percepción de uno mismo y de la realidad, así como intensificar las emociones. Los efectos también son similares a los de otros alucinógenos como la psilocibina (el alucinógeno de las setas mágicas) y el PCP.

Lo que dicen los expertos

Según un estudio de 2014 sobre la prevalencia del uso del peyote entre los nativos americanos, se observó un aumento bastante grande en el número de nativos americanos que usaban peyote durante aproximadamente cuatro años después de la aprobación de la AIRFA.

Sin embargo, los investigadores creen que el aumento observado se debió probablemente a que un mayor número de personas admitió haber consumido peyote una vez que fue legal. Desde entonces, la cifra se ha estabilizado en algo menos del 10%.

El consumo de peyote en el resto de la población estadounidense se sitúa entre el 1% y el 2%. Sin embargo, la mayoría de las fuentes de datos que cuantifican el consumo de drogas excluyen el peyote, lo que hace difícil calibrar el alcance total del consumo.

Aunque el peyote puede causar efectos negativos, las investigaciones realizadas indican que la ingesta de peyote no parece poner en peligro la vida. La mayoría de los efectos adversos de la droga desaparecen con el tiempo.

Sin embargo, se sabe que la mescalina del peyote es potencialmente dañina para los fetos en desarrollo. Si estás embarazada o crees estarlo, no debes consumir peyote.

Usos no contemplados o recientemente aprobados

El peyote ha sido utilizado por los nativos americanos durante miles de años en ceremonias religiosas y para tratar dolencias físicas. Sigue existiendo una excepción para los miembros de la Iglesia nativa americana.

Cuando son asistidos por un curandero o «roadman» (similar a un sacerdote o ministro), los miembros utilizan el peyote para facilitar la comunicación con el Gran Espíritu (también llamado el Creador).

El peyote y otros alucinógenos también se están estudiando como posibles tratamientos para las enfermedades mentales que se asocian a distorsiones perceptivas, como la esquizofrenia, el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno bipolar y la demencia.

Efectos secundarios comunes del peyote

La cantidad de mescalina necesaria para producir alucinaciones es muy pequeña, normalmente de 0,3 a 0,5 gramos. Los efectos pueden durar hasta 12 horas, pero dependerán del tamaño de la persona, su metabolismo y la cantidad que haya ingerido.

Efectos fisiológicos causados por la mescalina del peyote

• Pérdida de apetito
• Sequedad de boca
• Dificultad para dormir
• Aumento de la presión arterial
• Aumento de la temperatura corporal
• Aumento de la frecuencia cardíaca
• Adormecimiento
• Sudoración profunda
• Náuseas y vómitos intensos
• Movimientos descoordinados
• Debilidad

Efectos mentales causados por la mescalina del peyote

• Conciencia alterada
• Alteración de los sentimientos y percepciones
• Alteración de la noción del tiempo (es decir, pasa lento o rápido)
• Ansiedad
• Euforia
• Alucinaciones
• Incapacidad para enfocar o concentrarse
• Pánico
• Paranoia
• Sensación de relajación

Según el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas, no se sabe mucho sobre los efectos a largo plazo de los alucinógenos, incluido el peyote. Sin embargo, se sabe que el uso repetido o a largo plazo de alucinógenos puede causar los siguientes efectos:

• Trastorno de percepción persistente de alucinógenos (HPPD): Alrededor del 4% de las personas que consumen alucinógenos (incluidos el peyote y el LSD) desarrollan el HPPD. Esta afección provoca recuerdos de alucinaciones y alteraciones visuales que no desaparecen y pueden interferir en la vida diaria de la persona. Los síntomas pueden confundirse con trastornos neurológicos como un accidente cerebrovascular o un tumor cerebral.
• Psicosis prolongada: Aunque también es poco frecuente, los síntomas de esta afección incluyen alteraciones visuales y pensamientos dispersos, así como períodos de paranoia o alteraciones del estado de ánimo.

La psicosis persistente y el HPPD son raros en las personas que usan peyote, pero pueden ocurrir. Las condiciones pueden comenzar sin previo aviso y se han reportado incluso después de una sola exposición al peyote.

Por lo general, estos síntomas se dan en personas con antecedentes de problemas psiquiátricos.

Señales de uso del peyote

Según la Partnership for Drug-Free Kids, si un ser querido está consumiendo peyote, habrá algunos signos reveladores. Los siguientes pueden indicar que una persona está consumiendo peyote:

• Pensamiento desordenado o alejamiento de la realidad
• Boca seca
• Sudoración excesiva
• Piel enrojecida
• Pérdida de apetito
• Pánico
• Paranoia
• Confusión sensorial (como «ver» sonidos u «oír» colores)
• Problemas de sueño
• Movimientos descoordinados

Cuándo buscar ayuda

Si te sientes físicamente mal o mentalmente fuera de control, llama a emergencias o pide a un amigo de confianza (preferiblemente alguien que no esté intoxicado) que te acompañe al servicio de urgencias más cercano. El personal de urgencias no pretende meterte en problemas, sino mantenerte a salvo y ayudarte a recibir el mejor tratamiento para tu estado actual.

Tolerancia, dependencia y abstinencia al peyote

Al igual que otros psicodélicos, el peyote no es necesariamente adictivo cuando se usa con moderación y, en algunos casos, puede utilizarse para tratar la adicción y el consumo de sustancias. Sin embargo, las personas que usan el peyote son más susceptibles de crear una alta tolerancia, requiriendo el uso de más y más de la droga para lograr los mismos efectos.

La tolerancia al peyote puede aumentar rápidamente con el uso regular y en tan sólo tres a seis días.

¿Cuánto tiempo permanece el peyote en el organismo?

El peyote puede detectarse en el cuerpo humano desde dos días hasta tres meses. El tiempo que el peyote permanece en el organismo de una persona depende de factores individuales, como el metabolismo, la masa corporal, la edad, el nivel de hidratación, la actividad física y las condiciones de salud.

No hay un periodo de tiempo definido en el que el peyote pueda permanecer en el cuerpo. Sin embargo, existe un rango de tiempo estimado durante el cual se puede encontrar peyote con ciertas pruebas.

• La sangre: Hasta 24 horas
• Saliva: de 1 a 10 días
• Orina: 2 a 3 días
• Folículo piloso: Hasta 90 días

La detección del consumo de peyote no está incluida en las pruebas rutinarias de drogas, la mescalina debe ser analizada específicamente.

Adicción

El peyote no parece ser adictivo, pero se necesitan más investigaciones para determinar si es posible la adicción.

Algunos signos generales de adicción a tener en cuenta son:

• Pasar mucho tiempo para conseguir, usar o recuperarse de un viaje
• Tomar dosis más altas de lo necesario para conseguir un mayor subidón
• Tolerancia (necesitar más cantidad de la droga para obtener los efectos experimentados la primera vez)
• Usar el peyote a pesar de las consecuencias o los efectos negativos

Abstinencia

Aunque se necesitan más investigaciones para determinar los síntomas específicos de abstinencia relacionados con el peyote, se sabe que la droga provoca síntomas psicológicos de abstinencia, como depresión o disforia.

Cómo obtener ayuda por el uso indebido del peyote

Si tú o un ser querido estáis mostrando signos de abuso de peyote, o de cualquier otro tipo de sustancia ilícita, es importante saber que hay ayuda disponible. Aunque no existe un tratamiento específico para la adicción al peyote, los tratamientos de adicción basados en la evidencia pueden ayudar.

Los tratamientos que se utilizan habitualmente son:

• Terapia cognitivo-conductual (TCC): La TCC es una forma de terapia que se centra en identificar y cambiar los patrones de pensamiento que contribuyen al consumo de drogas.
• Grupos de apoyo: Hablar con personas de apoyo y ánimo con experiencias similares también puede ser útil mientras se recupera. Hay muchos tipos diferentes de grupos de apoyo a la sobriedad, por lo que es posible encontrar la opción que mejor se adapte a ti.
• Entrenamiento en habilidades para la vida: El desarrollo de nuevas habilidades para la vida y el aprendizaje de estrategias eficaces para afrontar el estrés también pueden ser beneficiosos. En lugar de utilizar sustancias para afrontarlo, puedes recurrir a otras estrategias que serán más productivas y menos perjudiciales.

Una vez que hayas dejado de consumir una sustancia con éxito, las estrategias de prevención de recaídas, como la prevención de recaídas basada en la atención plena, pueden ayudarte a mantener la abstinencia a largo plazo. Si estás luchando contra la recaída, habla con tu médico sobre las opciones que pueden ayudarte.

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