Decidimos dedicarle dos semanas a hacer un ambicioso recorrido por la Toscana, la Umbría, la Costa Amalfitana, la Puglia y la zona de Cinque Terre... lo logramos, pero no lo hicimos a un ritmo tan tranquilo... este recorrido es para ansiosos que les gusta tener todos los días con bastantes actividades y disfrutan espacios de relax puntuales en el viaje.

Como primer tip es importante destacar que se tendrá que manejar mucho, con lo cual, la persona que lo haga debe estar dispuesta a ello. Las rutas son un placer pero las distancias bastante amplias por momentos.

Comencemos por el principio. Llegamos a Roma y alquilamos un auto. Optamos por un económico ya que éramos dos y no necesitábamos mucho espacio. Nos intentaron ofrecer el GPS y menos mal que no lo aceptamos ya que el auto tenía uno incluido 😊😊. Un clio tipo rural hermoso!!

Como Roma ya conocíamos nos dirigimos directamente a nuestro primer destino, Perugia. Este pueblito pintoresco es para recorrerlo a pie y dedicarle un par de horas. No me resultó algo imprescindible del viaje, no me pareció tan bello, pero un par de horas de camino a Assisi podrían dedicarle. Nuestro destino final el primer día era el encantador y mágico pueblito de Assisi. Lugar donde vivió el Santo Francisco de Asís, quién podía hablar con los animales. Dejó toda su fortuna familiar y se dedicó a vivir sencillamente al servicio de dios. El lugar además de desarrollarse en una colina, con aire medieval, tiene la catedral de San Francisco, una obra arquitectónica imperdible, iglesias antiquísimas (una del 400) en el pueblo y un castillo tipo fortaleza arriba de todo, con un mini museo muy interesante. Descubrimos unos cinturones de castidad muy interesantes!

Nos hospedamos en un maravilloso hotel boutique que tenía un spa único, con baños romanos originales, que terminaron de deleitar nuestra visita. El hotel se llama Nun Assisi Relais y Spa, bien ganado el puesto número 1 en Tripadvisor! Tenían el verdadero circuito de sauna, que comienza con uno muy caluroso para terminar en uno helado. 

Comimos en una pequeña trattoria a la luz de las velas unas magníficas pastas, como no podía ser de otra forma en Italia.

 

 

 

 

 

 

Los días sucesivos recorrimos Pienza con su arquitectura perfecta según se dice, dormimos en un convento, realmente una experiencia muy especial. Continuamos nuestro recorrido por Montepulciano, Siena y sus pueblitos de alrededor. Pusimos en el GPS tomar la ruta "económica" con lo cual, recorrimos todo en rutas de campiña, increíble de ensueño! 

De todos estos pueblos, básicamente se recorre, arquitectura de la época medieval, con muchas iglesias muy bonitas, arte en todas las calles en un entorno natural bellísimo... en Siena ya se puede observar detalles florentinos, por ejemplo en su imponente catedral y mucho arte religioso.

 

Luego fuimos a San Casciano Dei Bagni a disfrutar de un día en las aguas termales de la zona. Optamos por un hotel hermoso, que se caracterizaba por tener distintas piletas y spa para sus huéspedes. El hotel imperdible se llama http://www.fonteverdespa.com/

 

Posteriormente visitamos Florencia, justo nos tocaron días de lluvia con lo cual, a mi parecer, le sacaron cierta belleza a la ciudad. De todas formas se respira arte... visitamos los lugares clásicos, las Galerías Uffici, el Ponte Vechio, Galería de la Academia, Palacio Piti, el Palazzo Vechio y por supuesto... sumado a su preciosa catedral con el domo a su lado, realmente valieron cada segundo de la visita. Creo que con dos días de visita se está más que bien! Nos hospedamos en el Hotel Continentall sin muchas pretensiones pero excelentemente ubicado a metros del Ponte Vechio. Lo único malo el olor a estancado pero parece que es un clásico de la ciudad.. 😔

 

 

 

Después de recorrer la Toscana y la Umbría, habiendo degustado riquísima pasta, quesos, aceite de oliva y por supuesto, vino, nos dirigimos a Pisa y posteriormente a la inigualable costa de Cinque Terre. 

De Pisa únicamente puedo decir que valió la pena la plaza donde se encuentra la iglesia, la torre inclinada, y un monumento, todos exquisitamente ornamentados, es impresionante, pero luego los alrededores, nada muy llamativo, de hecho nos pareció bastante sucio y desordenado...

 

En las famosas cinco tierras, nos hospedamos en Portovenere. Es un buen punto inicial para recorrer las en barco y si se quiere también en tren. Portovenere además de conservar el estilo de CT, con sus casitas coloridas y callejuelas donde perderse, tiene una salida directa de barcos hacia las tierras y bellísimos restaurantes así como un lindo hotel donde estuvimos hospedados con todas las comodidades. 

 

 

Luego partimos para la Costa Amalfitana. Sin palabras de este bellísimo lugar, realmente es un paraíso. Varios pueblos construidos sobre acantilados que dan al mar, con su arena negra volcánica le dan al lugar un aire encantador. Tenemos Amalfi, Positano, y Ravello. Bañadas por el mar Tirreno, son un espectáculo en sí mismas. Se las puede recorrer sencillamente en auto en un día porque están una pegadas a la otra. Nosotros partícula,este elegímos hospedarnos en Positano. Es inigualable su belleza, con su céntrito blanco, la iglesia con su cúpula de colores, magnífica que da a la costa, la vegetación que se entremezcla en las callejuelas y un ambiente lujoso en todo su espacio. Nos alojamos en un hotel bellísimo, llamado, Hotel Palazzo Murat: http://www.palazzomurat.it/, número uno en Tripadvisor, también bien ganado. Las habitaciones de estilo, decoradas con un gusto exquisito. Se los recomiendo fuertemente. Claro todos estos hoteles son para un presupuesto elevado, pero forman parte del viaje, de recorrer la cultura del lugar, por ello elegimos priorizar este tipo de "lujo" antes que hacer compras por ejemplo, que nos pareció más banal, pero va en cada uno...

 

En los tres días que estuvimos en la costa Amalfitana, decidimos utilizar uno para ir a conocer Pompeya. Una ciudad antiquísima de la época romana, que en la antigüedad fue literalmente enterada por la explosión de un volcán, dejando la coudad intacta e inclusive gente que quedó en el estado en el que estaba cuando los atravesó la lava. Nos fuimos un poco decepcionados porque estaba todo cerrado, no se podía ingresar prácticamente a ningún lado porque la gente se llevaba obsequios o bien dejaba marcas, entonces optaron por cerrarlo y realmente se complejizaba poder recorrerlo plenamente, de todas formas, es un lugar muy especial qué hay que conocer. 

 

Nuestro último lugar de recorrida en Italia fue la Puglia, bien al sur, otro mundo respecto del norte de Italia. Ciertamente más pobre y menos turístico, pero más genuino en todos sus aspectos. Recorrimos el especial céntrico de Alberobello con sus trulli, una antigua construcción rural propia de la región italiana de Apulia, que se realiza íntegramente con muros de mampostería de piedra en seco –sin mortero–, rematada con una gran cubierta de forma cónica.

 

 

 

Luego de este precioso lugar que nos llevó medio día, nos fuimos a nuestro lugar de alojamiento y a su vez base para recorrer que fue el increíble pueblo blanco de Ostuni. Decidimos quedarnos en el Relais & Chateau del lugar, INCREÍBLE. http://www.lasommita.it/

Por último, recorrimos varios pueblos de la zona y emprendimos nuestro regreso. No tengo lugares puntuales para sugerir de donde ir a comer salvo la Taverna de San Giuseppe, en Siena, que aparte de contar con un ambiente increíble, la comida era imperdible. No se pierdan la pasta al Ragú y la pasta con salsa de alcahusiles. Por el resto de los lugares, les recomiendo que indaguen y donde se sientan seguros entren, dudo que se vayan a arrepentir puesto que en Italia se comer y de lujo! 

- Día 1 a 3 Perugia y Assisi.

- Día 4: Montepulciano

- Día 5: Siena

- Día 6: San Casciano dei Bagni

- Día 7 a 9 Florencia

- Día 10 Pisa

- Día 11 a 12 Cinque Terre

- Día 13 a 14 Costa Amalfitana 

- Día 15 Pompeya

- Día 16 y 17: Ostuni y la Puglia.