Él me llamó y me dijo que me amaba; y el tiempo se detuvo un instante. Escuchar su voz me hacía tan feliz, sentía que mi cuerpo se estremecía y se erizaba mi piel como cuando me besaba y me tomaba de la mano. Y en ese breve momento volví a sonreír después de todos estos días tristes y que no nos pudimos ver. Pero cuando deseaba contestarle, sentí como todo se desvanecía Poco a poco; y