Get Even More Visitors To Your Blog, Upgrade To A Business Listing >>

Alejandro Roemmers: mensajero de la fraternidad universal. Inspirado por San Francisco de Asís, recibe un nuevo reconocimiento pontificio

En el amplio panorama de galardones y reconocimientos que el mundo concede a personas por sus notables logros y destacadas creaciones, emerge un ejemplo singular que trasciende la esfera tangible. Alejandro Guillermo Roemmers, el poeta y filántropo argentino, ha sido honrado con los premios San Francisco de Asís y el Doctorado Honoris Causa, galardones otorgados por la Orden de Franciscanos Menores a través de la Universidad Pontificia Antonianum.

En una época en la que los corazones anhelan un mensaje de fraternidad y amor, Roemmers se erige como un faro que guía hacia una perspectiva de vida centrada en cuidar al prójimo como a uno mismo, y en la transformación interior hacia una nueva era de comprensión mutua, paz y, por consiguiente, abundancia tanto terrenal como espiritual.

El Papa Francisco expresa: «La fraternidad humana es el camino, el camino para alcanzar la paz y la justicia». En una era en la que las diferencias a menudo generan divisiones y conflictos, el mensaje de fraternidad resuena como un urgente llamado a unir a la humanidad a través de la solidaridad y la comprensión mutua. Roemmers internaliza este mensaje, personificando el espíritu de San Francisco de Asís, el icono de amor y compasión que trasciende los siglos. El premio otorgado por los Franciscanos hoy no solo celebra sus acciones concretas, sino también rinde homenaje a su estilo de vida: un camino que refleja auténtica humanidad, empatía y el genuino deseo de contribuir al bienestar de todos.

La Universidad Pontificia Antonianum, fundada en 1887 y arraigada en una larga tradición de investigación espiritual, estudio y filosofía, ha decidido otorgarle el 9 de octubre el Doctorado Honoris Causa con especialización en Ecología Integral. Este título Académico Pontificio es especial al ser el primero otorgado a un laico, dado que los cuatro Doctorados anteriores con esta especialización habían sido legados únicamente a religiosos de la iglesia (el último de ellos fue otorgado al beato Fray Gabriel María Allegra, un referente histórico y traductor de la Santa Biblia al idioma chino).

El gesto de la orden franciscana hacia Roemmers es un reconocimiento a su contribución a la humanidad en crisis, siguiendo la enseñanza del Papa Francisco y los valores fundamentales franciscanos, con el objetivo de destacar su convicción y dedicación para promover los valores cristianos y su incansable búsqueda de una unión universal. Algo similar ocurrió con el premio San Francisco de Asís, otorgado en abril de 2023, una distinción sin precedentes (ya que nunca antes había sido otorgada a un laico a lo largo de la historia de la iglesia), que continúa celebrando su trayectoria y profundo compromiso con la construcción de un mundo más unido, equitativo y pacífico.

El camino trazado por Roemmers resuena poderosamente con las palabras de San Francisco: «Somos todos hermanos», un llamado a la fraternidad humana que trasciende fronteras, creencias, ideologías y formas de vida. En una época donde el individualismo y la desconexión parecen prevalecer, Roemmers desafía y enfrenta la vertiginosa decadencia del sistema actual al centrar su vida en el servicio a los demás a través de la literatura, la solidaridad y la promoción de la paz. Su labor filantrópica en Argentina y más allá refleja un compromiso inquebrantable con el bienestar del prójimo, personificando los valores que Cristo y luego San Francisco de Asís predicaron.

El legado de Roemmers nos recuerda que el reconocimiento y la celebración pueden ir más allá de los logros materiales; pueden honrar la forma en que vivimos y compartimos nuestro amor con los demás. Su vida es un testimonio de que la fraternidad y la compasión no son solo conceptos abstractos, sino una forma concreta y altruista de vivir. A través de su ejemplo, nos insta a reconsiderar nuestro propósito y a abrazar una forma de relacionarnos que trascienda el individualismo, abrazando la interconexión y el amor como un nuevo paradigma en el camino futuro de la raza humana.

En un mundo donde a menudo el ruido eclipsa la voz del amor que clama por ser escuchada, Alejandro Roemmers surge como un recordatorio viviente de que cada uno de nosotros tiene el poder de empezar a marcar la diferencia en este mismo momento. Su historia de vida, marcada por la superación personal, el esfuerzo y los logros, nos inspira a mirar más allá de nosotros mismos. Su mensaje no es solo «Se puede», sino «¡Podemos!», instándonos a emprender juntos la construcción de un mundo donde la fraternidad, la compasión y el amor sean los cimientos de nuestra existencia. En su vida y trabajo encontramos un símbolo de esperanza y una invitación a ser activistas de la plena hermandad en un planeta que anhela y necesita urgentemente esa luz.

El Abrazo de Asís fue el primer grito de amor al universo creado por Alejandro, nacido en la emblemática Porciúncula. Luego, a solicitud de la Fundación Fratelli Tutti y por referencia del Papa Francisco para su evento global «#Not Alone», desde la imponente arquitectura del colonato de Piazza San Pietro, se produjo un hecho histórico en el que por primera vez se unieron 33 Premios Nobel y medio millón de jóvenes de todas las etnias y países al gesto de Alejandro. La jornada culminó en un nuevo y conmovedor Abrazo, mientras la voz de Alejandro, quebrada por la emoción, cerraba el evento recordándole al mundo: «¡SOMOS TODOS HERMANOS!»



This post first appeared on Reporte Global, please read the originial post: here

Share the post

Alejandro Roemmers: mensajero de la fraternidad universal. Inspirado por San Francisco de Asís, recibe un nuevo reconocimiento pontificio

×

Subscribe to Reporte Global

Get updates delivered right to your inbox!

Thank you for your subscription

×