Cómo sabes si la pastilla de freno está gastada

1. Observa el grosor: Si es posible, retira la rueda delantera del coche y examina visualmente las pastillas de freno a través de la abertura del calibrador de freno. Las pastillas de freno nuevas suelen tener un grosor de aproximadamente 12 mm. Si las pastillas parecen ser más delgadas que esto, es posible que estén gastadas.

2. Escucha ruidos: Presta atención a cualquier ruido inusual al frenar. Si escuchas chirridos, chillidos o sonidos metálicos al presionar el pedal de freno, puede ser una señal de que las pastillas de freno están gastadas y necesitan ser reemplazadas.

3. Verifica el desgaste mediante indicadores: Algunas pastillas de freno tienen testigo de desgaste de pastilla de freno incorporado. Estos son pequeñas lengüetas de metal en las pastillas que, cuando se desgastan, hacen contacto con el disco de freno y producen un chirrido característico. Si escuchas este sonido al frenar, es probable que las pastillas estén gastadas.

4. Inspecciona visualmente: Si no puedes ver las pastillas de freno a través del calibrador, es posible que debas quitar completamente el conjunto de freno para inspeccionarlo. Si las pastillas tienen menos de 3 mm de grosor, es recomendable reemplazarlas, ya que están cerca de alcanzar su límite de desgaste.

Qué tipos de testigo de desgaste llevan las pastillas de freno

1. Indicador metálico: Muchas pastillas de freno tienen una pequeña lengüeta metálica o clip de desgaste en su parte superior. Cuando las pastillas se desgastan a un nivel determinado, este indicador entra en contacto con el disco de freno y produce un chirrido característico al frenar. Este ruido audible es una señal clara de que las pastillas necesitan ser reemplazadas.

2. Indicador visual: Algunas pastillas de freno tienen marcas o ranuras en la superficie que permiten una inspección visual rápida del desgaste. Estas marcas suelen tener un grosor específico y cuando las pastillas se desgastan hasta ese nivel, es hora de reemplazarlas. Puedes comparar el grosor actual de las pastillas con estas marcas para determinar si están gastadas.

3. Sensores electrónicos: En algunos vehículos modernos, las pastillas de freno pueden estar equipadas con sensores electrónicos. Estos sensores están conectados al sistema de frenos del automóvil y se activan cuando las pastillas se desgastan hasta un nivel determinado. Cuando el sensor se activa, se enciende una luz de advertencia en el panel de instrumentos del coche, indicando que las pastillas de freno deben ser reemplazadas.

4. Se enciende el testigo de líquido de freno bajo: Este también puede ser un síntoma de que las pastillas necesitan cambiarse.