Pacientes y cruzadas Manos, en el fuegodel mediodía, sostienen el hilo,Ariadna es una flor de BarbadosY crece junto a la puerta del Laberinto. Bajo las azules e irreales aguas del atardecer,Las manos se abrazan como pétalos blancos,Esperando ver al audaz aventurero,Ariadna espera tranquila como un coral,Silenciosa como una planta submarina. Los tambores retumban a orillas de la ciudad:Mudas