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Radek 086 La persona detrás de la historia

Pronto las IA escribirán mejores novelas que los humanos, claman muchos títulos clickbait. Las capacidades de la inteligencia artificial están creciendo a un ritmo sobrecogedor. Cuidado escritores: al igual que los camioneros y los cajeros, pronto se volverán redundantes. Eso suena preocupante, pero ¿la IA es algo de lo que realmente estar preocupado?

La premisa es sencilla. Los escritores leen y experimentan un montón de Cosas y las convierten en historias. Toma mucho tiempo y esfuerzo escribir una buena historia e incluso más establecerte a ti mismo lo suficiente para que alguien quiera Leer tus cosas. Por otra parte, una computadora, puede analizar todos los libros escritos en unas pocas horas. En unos pocos días, podría procesar todos los posts compartidos en Facebook, Twitter y Tumblr. En unos pocos meses, todos los videos posteados Alguna Vez en Youtube. ¡Si una cosa como esa aprende a escribir, todos estamos condenados! ¿Cómo podría competir siquiera un saco de carne?

En este punto, la mayoría de los artículos proceden a mostrar un fragmento más que poco sobrecogedor de un escrito generado por una IA. Estos son los primeros días, dicen. Esperen y verán.

Más allá de cualquier duda, la tecnología mejorará. Es difícil decir cuán rápido y si alguna vez igualará las capacidades de un humano. Podría. Y eso no importa.

Escribir sirve a muchos propósitos: informar, persuadir, vender, entretener. Pero por encima de todo, escribir es una forma de comunicación. Es el autor hablándole a su lector, al igual que te estoy hablando ahora a ti. (¡Espero que estés bien!)

Para propósitos utilitarios como manuales de usuarios y anuncios, la autoría difícilmente es relevante. La mayoría de las personas no navegan Amazon pensando, ¡Diantres! Quiero leer más descripciones de productos de este autor. Difícilmente uno notaría que una máquina está escribiendo la publicidad optimizada para SEO de los zapatos. Afortunadamente, las cosas son muy diferentes en lo que respecta a obras de arte.

Muchos escritores de ficción intentan disociarse a sí mismos de su trabajo, sólo para atraer incluso más interés. En primer lugar, Milan Kundera, le ha dicho durante mucho tiempo a sus lectores que se preocupen por sus libros, no por él. J. K. Rowling, tuvo un breve y secreto trabajo como Robert Galbraith hasta que alguien la delató. ¿Por qué estos autores de clase mundial no publicarían sus obras de forma anónima? ¿O cada libro bajo un pseudónimo diferente? La respuesta es simple: debido a que no importa cuán bueno sea, a nadie le importaría.

Por supuesto, la calidad es muy importante, pero eso sólo una parte de la ecuación. Al leer la obra de alguien, desarrollamos una relación con ellos. Si nos gusta lo que hacen, queremos leer más. Queremos conocerlos mejor, saber quiénes son y por qué escriben lo que escriben. ¿Y cómo es posible que alguien escriba tan bien?

Lectores y fans veteranos a menudo llegan a las firmas de autores y convenciones, sintiendo que están encontrándose con un viejo amigo. Han desarrollado una conexión profunda con ellos a través de una experiencia compartida. Leer una historia significa meterse dentro de la cabeza del autor, lo cual puede ser una experiencia bastante íntima.

Ya cada año hay una abundancia de nuevas obras siendo publicadas, muchas de ellas sorprendentemente buenas. Y, aun así, lo más probable es que tú y yo escojamos el nuevo libro de Neil Gaiman por encima de un aclamado autor debut, incluso si no es tan bueno. Por otra parte, si tu hermano o mejor amigo publican su primera novela, probablemente querrás leerla.

Cuando hace unos años una IA se las arregló para convertir cualquier fotografía en una pintura al estilo de un viejo maestro como Van Gogh o Picasso, el subidón duró unas pocas semanas. Imágenes de perfil de la Noche Estrellada se esparcieron por Twitter como un incendio. Entonces las personas siguieron adelante. Que algo luzca como arte no significa que es arte. La conexión humana está en el mismo centro de esta. Sin ella, no hay arte.

¿Los humanos serán alguna vez capaces de amar y desarrollar una verdadera conexión con máquinas inteligentes? Ese es uno de los temas que explora Annalee Newitz en su fascinante novela de ciencia ficción Autonomous. Quizás lo haremos. Pero cuando llegue la singularidad y las máquinas se vuelvan un reemplazo completo y superior para los humanos, sospecho que tendremos problemas más importantes de los que preocuparnos que quien está escribiendo los libros.

Como están las cosas ahora, adoro mi máquina lavaplatos, pero difícilmente quiero hablar con ella sobre mi día. ¿Y si alguna vez escribe un libro? Entonces definitivamente quiero leerlo.

Hola, soy Radek . Soy escritor, ingeniero de software y fundador de Writing Analytics —un editor y rastreador de escritura diseñado para ayudarte a derrotar el bloqueo de escritor y crear una rutina de escritura sostenible.

Traductor: José Alejandro Cantallops Vázquez

Puedes seguirlo aquí en su blog de Tumblr.

Si te gustó esta entrada, puede que te interese seguir leyendo otros consejos de Radek que he traducido (clic aquí).

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