Construyendo un fuerte

El tiempo de construcción de un Castillo depende del diseño y de los fondos disponibles, puede durar desde medio año hasta medio siglo. También depende de la situación anterior a la construcción: un castillo en ruinas es, después de todo, un castillo a medio construir, y renovarlo (y/o actualizar) las murallas es mucho más barato que construir unas nuevas. Esto puede ser visto en la ciudad de Dubrovnik, donde las fortificaciones medievales (enormes)  que habían fueron reforzadas con una línea exterior de muralla para reforzarlas en contra del fuego de cañón, después de la caída de Constantinopla en 1453,

Ambos, el tiempo de construcción y la extensión de las fortificaciones dependen de las capacidades (financiera, logística, humana) del constructor, así como también de la necesidad percibida. Muchos castillos nunca fueron terminados debido a la carencia de recursos.

Los constructores son profesionales; campesinos, soldados y otros principiantes fueron sólo usados como fuerza de trabajo. Esto significa que tenían que ser pagados y, de hecho, muchos viajaban de lugar de construcción a lugar de construcción. El castillo de Beaumaris en Inglaterra requirió 400 albañiles y 1.000 asistentes para ser construido en un tiempo casi récord (desde 1278 a 1280).

Tipos de castillos

Castillo de mota y bailey

El castillo de “mota y bailey” o mota castral, es la primera y más sencilla forma de castillo. Consiste en un montículo de tierra con una empalizada o muralla en la cima. La mota propiamente dicha es un montículo, mientras que el bailey es un área aplanada, una especie de patio, al lado del montículo donde se construyen los edificios. El montículo puede estar rodeado por una zanja. El torreón se construía encima del montículo. Con el tiempo, muchos de tales castillos “pasaron” de una empalizada de madera a murallas de Piedra. Sin embargo, eran necesariamente pequeños, debido a que construir un gran montículo es desproporcionadamente difícil y a medida que las murallas de piedra se volvieron más comunes, el montículo perdió el favor. Una ventaja era que sólo se necesitaban semanas para construirlo.

Castillo concha

El castillo concha es una evolución del diseño de mota y bailey. Es delgado, redondo y con un cercado defensivo construido de piedra. El muro de piedra reemplazó a la muralla original de madera del torreón del montículo, conteniendo los edificios de madera dentro. La mayoría de las veces sólo el torreón en la cima del montículo era rehecho en piedra y, por tanto, tales castillos eran pequeños en tamaño: 20-25 metros de diámetro. Las murallas eran delgadas y ligeras, para así evitar que el montículo colapsara. Fueron construidos entre principios de 1100 y 1210.

Castillo de piedra

Los castillos de piedra fueron contemporáneos de los castillos concha, el primero en ser construido fue la Torre de Londres en la década del 1070. Para el momento de la muerte de William el Conquistador, habían sido construidos 86. Pero mientras que los castillos concha eran un callejón evolutivo sin salida, los castillos de piedra continuaron volviéndose más poderosos y elaborados hasta, e incluso después, de la aparición de las armas de pólvora. La piedra le permitió a los castillos ser mucho más grandes, así como también ser mucho más resilientes a los ataques e, igual de importante, a los elementos. Las fortificaciones de piedra, incluyendo los castillos, pueden durar siglos con poco o ningún mantenimiento. También son mucho más fáciles de mantener calientes en invierno y pueden ser más altos que la mayoría de las máquinas de asedio que pueden traer los atacantes (aunque las torres de asedio de la antigüedad podrían haber tenido 30 metros de altura, tales ejemplos fueron raros en la Edad Media).

A menudo, estos castillos eran del tipo concéntrico, con el torreón estando rodeado por un muro interno de poca altura. Los edificios domésticos tales como los salones, los barracones, las despensas, etc. estarían incluidos en el bailey, rodeados por una muralla. La muralla podía ser de un grosor superior a los 1,5 metros y ser sólida en todo su recorrido.

Tales castillos eran extremadamente costosos y consumían tiempo para ser construidos (5-10 años), costosos de mantener, fríos y goteantes, y podían volverse rápidamente vulnerable a los ataques, tales como un torreón cuadrado que es vulnerable a ser minado por los costados. Simplemente renovar el castillo de Dover le costaba un tercio de su ingreso anual a Henry II.

Castillos concéntricos

El castillo concéntrico es un castillo dentro de un castillo. Esencialmente es un castillo de piedra diseñado para estar rodeado por una muralla exterior. La muralla interior es más gruesa y alta y está rodeada por una muralla exterior más baja (muy parecido a las murallas teodosianas de Constantinopla). Los primeros ejemplos fueron construidos a mediados de los 1200, con sus mejores ejemplos a partir de 1290 a principios de los 1300. Antes del castillo de Caerphilly en 1270, la muralla exterior simplemente reforzaba la interior; pero desde entonces, la muralla exterior era una parte integral de la defensa y era considerada como un ente separado de la muralla interior. Entre la línea de fuego, el foso, la muralla exterior, el patio y la muralla interior, un castillo así tendría cinco obstáculos y dos capas separadas de defensas (Constantinopla tenía seis obstáculos y tres capas de defensa en las murallas teodosianas). La forma simétrica también significaba que se tenía una mejor vista de los campos circundantes.

En la mayoría de los casos, la única forma que tenían los atacantes de conquistar el castillo era rendir por hambre a los defensores. Los ataques dirigidos a las puertas serían combatidos a través de la línea de fuego, el foso, la puerta exterior (puerta exterior, patio, puerta interior), el patio del castillo y la puerta interior (una vez más, puerta exterior, patio, puerta interior). El patio del castillo entre las murallas era apodado la “zona de muerte,” debido a que los atacantes que lo atravesaban estaban expuesto al fuego de la muralla interior y, probablemente incluso de la muralla exterior, si esta no había sido tomada por completo.

Sin embargo, tales castillos eran extremadamente costosos y necesitaban años para ser construido. Eduardo I gastó 22.000 libras esterlinas en el castillo de Caernarfon, lo cual era más que el ingreso anual del tesoro real.

Artillería

La balista es una especie de ballesta pesada que es cargada con un cabestrante, puede lanzar virotes de 77 cm con cabezas de flecha que pesan 200 g o piedras entre los 2,5-40 kilogramos en un rango de 450 metros, aunque el rango óptimo está entre los 100-170 metras. Las balistas más grandes pueden lanzar virotes/dardos a más de 1,100 metros; típicamente son sólo usadas como armas de asedio o defensivas. Estos virotes son capaces de penetrar una armadura de placa. La balista normal puede lanzar tres virotes por minuto; mientras que la balista de repetición, más pequeña y débil, puede alcanzar los 11 virotes por minuto. Las balistas que lanzan piedras pueden lanzar una piedra de 26,3 kg más allá de 400 metros, puedes confiar en que matará a un hombre a 100 metros; las murallas tienen que tener 5 metros de grosor para soportar un impacto a 150 metros. La balista lanzadora de piedras más ligera es usada con más frecuencia para eliminar las almenas de la muralla, quitándoles la cobertura a los defensores. Los lanzadores de piedras súper-pesados pueden lanzar piedras de 75 kg; con proyectiles pequeños pueden alcanzar el rango de los 700 metros. Las balistas son ubicadas típicamente en las torres, no habrá espacio para ninguna pieza de artillería en la muralla exterior, y son usadas para contrarrestar el fuego de la batería enemiga. Sin embargo, su complejidad y necesidad de mantenimiento regular significa que no eran usadas de manera típica en una sociedad medieval. Sólo serían usadas si la sociedad pasaba de la antigüedad a la edad media y de ahí al Renacimiento sin pasar realmente por la edad media (es decir, el colapso y feudalización de la sociedad). Pero esto significa que no habría ningún lord feudal, presencia de grandes estados sofisticados similares al Imperio Romano (incluso si es del siglo 7-11) y, en general, un mundo muy diferente al de la fantasía medieval.

Un trabuquete de contrapeso usa un montón de rocas o plomo en lugar de una dotación y es lo suficientemente simple de construir incluso por sociedad que carecen del conocimiento técnico y/o la capacidad de construir una balista. Un contrapeso de 2 toneladas permite que una piedra de 15 kg sea lanzada a 168 metros y un contrapeso de 9 toneladas permite que una piedra de 140 kg sea lanzada a 300 metros. Un trabuquete de 4 toneladas te da un rango de 450 metros con una piedra de 10 kg y 183 metros con una de 100 kg. Un trabuquete de 6 toneladas te da un rango de 320 metros con una piedra de 55 kg y 200 metros con una piedra de 100 kg. Los proyectiles más pesados que se usan son de 240 kg, mientras que el rango más largo (piedra ligera y trabuquete pesado) está alrededor de los 400 metros. Los mismos proyectiles pueden o no tener una forma y peso estandarizado: una vez más, esto dependerá de la sofisticación de la sociedad (como regla general, si tienes una balista o artillería de pólvora, los proyectiles estarán estandarizados; si no los tienes, no lo estarán). Los trabuquetes pueden ser usados en la defensa de la ciudad y del castillo. Sin embargo, no pueden ser ubicados en la muralla, debido a que el funcionamiento del trabuquete dañará la muralla; en vez de ello, serán ubicados detrás de la muralla, de forma que sólo el brazo del trabuquete sea visible por encima de esta e incluso entonces, sólo cuando esté completamente extendido.

Referencias:

• Povijest Ljudskog Roda – Srednjovjekovni Dvorci.

Sobre el autor:

Toni Šušnjar es un historiador aficionado y un entusiasta de la fantasía con un interés particular en la historia antigua y medieval, así como también en la alta fantasía y medieval. También escribe el blog Military Fantasy. Puedes seguirlo su página de Facebook Military Fantasy.

Traductor: José Alejandro Cantallops Vázquez

Correctora: Marisol Cossío Fernández

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