La población carcelaria actualmente en República Dominicana es preocupante debido al hacinamiento que existen en las prisiones del país.

El director general de Prisiones, Roberto Hernández Basilio, indicó que a la fecha hay 25,600 personas presas en el país, de las cuales, 10,401 han sido condenadas, mientras que 15,310 guardan prisión preventiva.

Pese al alto número de privados de libertad, Hernández Basilio precisó que República Dominicana es el único país en Latinoamérica que ha tenido una reducción significativa de la población de presos luego de la pandemia del COVID-19.

“La sociedad debe conocer que en agosto de 2020 teníamos 27,800 personas privadas de libertad. A la fecha de hoy tenemos 25,600, lo cual quiere decir que, en Latinoamérica, según hemos podido referencial con otros países, este es el único país donde ha bajado la población de privados de libertad post pandemia”, expresó durante la inauguración del Centro de Atención y Privación de Libertad Provisional (Caplip-4) en el Batey Bienvenido del sector Manoguayabo, en Santo Domingo Oeste.

Ante esta situación, algunas autoridades consideran que las constantes prisiones preventivas son la razón de que las cárceles estén hacinadas, asegurando que los presos tengan que estar en condiciones indignas.

Investigación por fuga de presos en el último mes está a cargo de la Policía Nacional

Casi 70 % de presos viven hacinados en el país, según informe

Autoridades hablan sobre situación 

El Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, sostuvo que la realidad carcelaria actualmente está matizada “indiscutiblemente” por las prisiones preventivas, razón que hace que exista una sobrepoblación y que se traduzca en hacinamiento.

“Ha habido un esfuerzo indiscutiblemente y hoy estamos en un recinto que significa un poco la dignidad del ser humano, que trata de garantizar, no solamente a las personas que están privados de libertad sino también los que tienes problemas de salud mental un espacio para que pueden reinsertarse en la sociedad”, indicó al hablar sobre el nuevo centro en Manoguayabo.

En tal sentido, el diputado Elías Báez, entiende que al Código Procesal penal “hay que buscarle la vuelta”, al considerar que hay personas que no tienen que ir a las cárceles del país y se están liberando gente que no deberían estar en libertad.

Fuga de presos está en manos de la PN 

Tras la fuga de al menos siete presos de dos cárceles de República Dominicana en tan solo un mes, Hernández Basilio indicó que las investigaciones están en manos del Departamento de Investigación de la Policía Nacional. 

Agregó que tras estas fugas se han activado los debidos protocolos de lugar y asegura que se están realizando las búsquedas de los privados de la libertad. 

Sobre el caso de la reciente fuga de la cárcel preventiva del Palacio de Justicia Distrito Judicial de San Pedro de Macorís, Hernandez Basilio expresó que revisó el informe, sin embargo, dijo que este lugar no opera en el sistema formal de servicio penitenciario correccional. 

Inauguran cárcel provisional para reducir hacinamiento en Santo Domingo Oeste

Inauguran cárcel provisional para reducir hacinamiento en SDO

La Procuraduría General de la República (PGR) inauguró este viernes el Centro de Atención y Privación de Libertad Provisional (Caplip-4) en el Batey Bienvenido, en el sector Manoguayabo de Santo Domingo Oeste.

El proyecto fue creado ante las críticas constantes sobre el hacinamiento en el destacamento Bella Colina y las denuncias sobre las condiciones infrahumanas en las que vivían los reclusos allí recluidos.

Durante el evento, el director general de Prisiones destacó que este proyecto es el cuarto centro de detención preventiva y representa un avance en la sociedad.

"Claro, en una sociedad no deberíamos nosotros aspirar a que haya más cárceles, ahora, que las cárceles que haya sí sean dignas", precisó Hernández.

Mientras, el fiscal titular de Santo Domingo Oeste, Edward López, informó que el centro tiene capacidad para albergar a 70 personas. Añadió que en 2016 se abrió la cárcel de Bella Colina como una instalación provisional, pero permaneció en uso durante siete años.

La construcción del centro tuvo una inversión de 10,538,455.56 pesos. El edificio consta de un primer nivel y tres pabellones (uno de ellos para mujeres), equipados con inodoros, duchas, área médica integrada, asistencia psicológica y una cabina para que los presos se comuniquen con sus representantes.

Además, contará con una cancha deportiva, un salón multiuso, un comedor y otros espacios.