Caracas me llena de sorpresas, ante la sobredosis de sobresaltos, desesperanzas, aturdimiento, confusión, desorientación, desconcierto, perturbación, y alarmas que te disparan en tu cerebro en la que hay que tener una aptitud de sobreviviente, es un elixir y deleite tropezarte con personajes que tienen inquietudes parecidas a las tuyas, no solo sueña, las lleva a cabo y la transforma en