Hiroshi Kiyotaki fue uno de los cinco japoneses que jugaron en las ligas alemana y española, y estaba emocionado de ver a su país unirse a los ganadores anteriores de la Copa del Mundo en el Grupo E para el torneo de este año en Qatar.

El jugador de 32 años, que actualmente dirige a su antiguo club, el Cerezo Osaka, en la máxima categoría de Japón, dijo que sus sentimientos no eran necesariamente solo nostalgia de su tiempo en Europa, sino más de Japón para enfrentar a dos favoritos al título en el escenario más grande. .

Kiyotaki, quien fue convocado por última vez en marzo de 2017 antes de que una serie de lesiones lo dejaran fuera de la Copa del Mundo de Rusia 2018, dijo recientemente a Kyodo News.

“Naturalmente, se vio como un grupo difícil, pero sentí que entramos en un buen grupo. Esperaba que entremos allí un rato y pensemos: ‘Vaya, va a ser divertido'”.

Un delantero ágil con una visión precisa y toque de pies, Kiyotake fue una pieza importante en el equipo olímpico de Londres 2012, el cuarto clasificado de Japón, que venció a España por 1-0 en su primer partido en Hampden Park.

Su única aparición fue en la Copa del Mundo de 2014 en Brasil, pero permaneció en el banquillo cuando Japón sufrió una derrota por 2-1 ante Costa de Marfil antes de empatar 0-0 con Grecia con 10 hombres. Ingresó hace apenas cinco minutos en el último partido de la fase de grupos contra Colombia donde los Samurai Blue perdieron 4-1 para salir del torneo.

“De mi tiempo en los Juegos Olímpicos y la Copa del Mundo, realmente siento la importancia del primer partido”, dijo. “Conseguir impulso depende de ese juego”.

El productor juvenil de Oita Trinita, Cerezo, se fue a Alemania justo después de los Juegos Olímpicos, y después de dos temporadas con Nurnberg y Hannover, anotando 17 goles en 117 partidos de la Bundesliga, Kiyotake ve temas comunes entre los futbolistas japoneses y alemanes.

“Alemania es muy similar a Japón en que todos juegan con disciplina, y en ese sentido espero un fuerte acercamiento de ambos lados con diferencias individuales resueltas”, dijo.

Si bien Kiyotaki reconoció que Alemania era un “equipo equilibrado” organizado por el portero Manuel Neuer, dijo que los tres puntos deberían seguir siendo el objetivo de Japón en lugar de contemplar un empate desde el principio.

“Tenemos la oportunidad de jugar con un muy buen equipo en Alemania y personalmente quiero que Japón vaya por la victoria, y una parte de mí cree que realmente podemos”, dijo.

“Tenemos muchos jugadores jugando en Alemania, algunos en España también, y creo que sería más fácil jugar partidos contra equipos con jugadores que muchos de nuestros miembros conocen bien”.

La permanencia de Kiyutaki en España duró media temporada después de que se uniera al Sevilla, tres veces campeón de la Liga Europea, en ese momento, en 2016.

Posiblemente todavía el paso japonés más famoso a La Liga, Takefusa Kubo nunca jugó para su club matriz, el Real Madrid. Yoshito Okubo, Takashi Inoue, Shinji Okazaki y Yoshinori Muto, que han jugado períodos de la Bundesliga, han jugado con equipos fuera de la carrera por el título en España.

Kiyotake tuvo un debut auspicioso, jugando los 120 minutos completos en su derrota por 3-2 en la prórroga en la Supercopa de la UEFA contra el Real Madrid, antes de marcar y asistir a otro en la victoria inicial del Sevilla por 6-4 en La Liga sobre el Espanyol. Pero las cosas se esfumaron después de que Samir Nasri llegó a préstamo del Manchester City y se vieron agravadas por sus propios problemas con el idioma.

La competencia por las posiciones de centro del campo ofensivo fue feroz y uno de sus rivales directos, Pablo Sarabia, quien se unió al equipo andaluz al mismo tiempo, se interpondrá en el camino de Japón en Qatar.

“Era un jugador realmente serio, tranquilo y muy hábil desde el principio”, dijo Kiotaki sobre el jugador del PSG de 30 años, que anotó en los dos últimos partidos de España en la UEFA Nations League contra Suiza y la República Checa en junio. .

“La forma en que sostenía el balón era única, y era difícil para otros patearlo. Podía dárselo a alguien si estaba bajo presión, o usarlo como un truco para superar al propio defensor”.

“(Pero) lo más importante fue su talento para estar frente a la portería. Es difícil ser un creador de juego y un creador de juego definitivo, y ahí es donde creo que es un buen jugador”.

Sin embargo, Kiyotaki tiene experiencia venciendo a España en Glasgow, y sugirió que un enfoque incansable de ese partido, en el que sus homólogos técnicamente talentosos derribaron a un hombre después de recibir un gol, podría proporcionar un punto de apoyo.

“Nuestra reputación antes de los Juegos Olímpicos no era para nada alta y nuestra prioridad era enfrentarlos duro porque no teníamos nada que perder. Estuvimos presionando a cada uno de sus jugadores todo el tiempo”, dijo. “Creo que será necesario contra España”.

“Ellos van a tener la mayor parte de la posesión y van a perder fácilmente si seguimos jugando uno a uno, así que la forma en que presiones al portador de la pelota será importante”.

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