Publicado por Jesús Salvador Gómez en Cinemascomics.com | Cine, cómics y series - Noticias de cine, series y cómics. Marvel, DC Comics, Star Wars, Netflix. Estrenos, tráilers...

El estreno de Alien: El octavo pasajero tuvo lugar en 1979 pero no fue hasta 1986, coincidiendo con el estreno de Aliens: El regreso, cuando Dark Horse dio salida en cómic a las historias de los xenomorfos. Panini Comics agrupa a gran formato y con más de mil páginas los primeros años de publicaciones.

Desde el corazón del infierno… yo te apuñalo

Citar una frase extraída de la obra Moby Dick escrita por Herman Melville a mediados del Siglo XIX, y que ha sido homenajeada en el cine por películas como Star Trek II: La Ira de Khan, no resulta gratuita cuando hablamos de los Aliens que pueblan las páginas de los comics que tenemos entre manos dentro de este macro volumen. Nadie que se acerque a estas historias puede dudar de la letalidad de estos seres pero mucho menos de su resistencia a las condiciones más adversas y a su capacidad de supervivencia cuando parecen estar contra las cuerdas.

Aquellos que se enfrenten a un xenomorfo deben ser muy conscientes de la necesidad de cerciorarse de su muerte porque el menor margen de confianza se volverá en su contra, pues incluso vencidos, al borde de una esclusa que les empuje al vacío del espacio, el alien puede arrebatarnos la vida, morirá matando si es preciso.

Hemos sido testigos, durante la crónica de las múltiples películas que han protagonizado, de la forma en que se organizan, la jerarquía que siguen, su comportamiento protector hacia la colmena de la que forman parte. Son capaces de hacer sacrificios para proteger a su reina, la que perpetúa la especie colocando los huevos que al eclosionar darán vida a la primera forma que adquieren, la de los abrazacaras. Una vez estos coloquen su semilla en otro ser vivo comenzará la gestación de la criatura definitiva, esa máquina de muerte que tanto terror lleva produciendo desde hace más de cuatro décadas. Y a la hora de llevar esas historias a este formato Dark Horse optó por abrazar lo que ya habíamos podido experimentar en las dos primeras películas.

Lo que pudo ser y el canon cinematográfico no permitió

Según nos adentramos en la lectura lo primero que encontramos es una historia que tiene como protagonistas al cabo Hicks de los Marines Espaciales (Space Marines) y a Newt, la niña que rescata la teniente Ripley en la segunda película de la saga. Todos los aficionados a la franquicia sabemos lo que sucedió con Hicks y Newt porque lo pudimos ver en Alien 3 (1992), por lo que esta aventura dejó de ser canon oficial desde muy pronto. Lo peor de este primer arco del tomo es el recoloreado que sufrió posteriormente pues fue publicado originalmente en blanco y negro. El final es entre feliz y agridulce y aunque ahora quede en anécdota merece la pena leerlo. El guión corre a cargo de Mark Verheiden (productor y guionista para cine y televisión) y el dibujo es obra de Mark A. Nelson (con algunos trabajos para las principales editoriales de EEUU).

Verheiden también firma, junto a los dibujantes Denis Beauvais y Sam Keith, las dos miniseries siguientes. Los mismos protagonistas, Hicks y Newt, a los que se une cierta teniente que es el azote por excelencia de los xenomorfos, Ellen Ripley. Su aparición se hace esperar hasta el final de la primera de ellas pero su presencia eclipsa cualquier otra. De nuevo sabemos que estas páginas ya no forman parte del canon de la saga pero mantienen el tono terrorífico y claustrofóbico que tanto caracteriza a Aliens. Beauvais y Keith no pueden ser más diferentes, el primero con un dibujo tendente al realismo y con líneas limpias se contrapone al segundo con su trazo más sucio y oscuro.

Lo que debe destacar

Tras un puñado de historias sueltas nos encontramos con dos miniseries de cuatro números cada una que representan un punto de inflexión importante. En Genocidio y Colmena nos encontramos con tramas mucho más adultas y enrevesadas que estudian diferentes formas de acercarse a los xenomorfos, sin abandonar un tema que ha sido constante en la franquicia, el aprovechamiento de una u otra forma de las virtudes de los alienígenas, bien como arma letal o como objeto de estudio, para encontrar beneficio corporativo en cualquiera de los casos. Ese todo vale para los intereses de unos pocos que no son los que suelen sufrir las consecuencias de los que tienen la mala suerte de cruzar sus caminos en esos seres. En la primera de ellas guión de John Arcudi y dibujo de Damon Willis. Para la segunda Jerry Prosser en el procesador de textos y Kelley Jones a los lápices.

Tras esa novela corta ilustrada que es Tribes nos encontramos con la Historia de Newt, contando su origen y parte de lo que ya vimos los cines en Aliens: El Regreso, por Mike Richardson y Jim Somerville, justo antes de dar paso a la recta final del tomo con la adaptación en tres partes de la película Alien 3, a cargo de Steven Grant y Christopher Taylor. Se trata de una fiel adaptación hasta la última de las escenas, aquella que daba fin al personaje de Ellen Ripley… antes de que se decidiesen a recuperarla en la cuarta película de la franquicia, Alien: Resurrection.

Para rematar el gran tomo de tapa dura nos encontramos con algunas curiosidades, como los mini comics que aparecieron acompañando a las figuras lanzadas por Neca bajo el nombre de Aliens: Space Marines. Además multitud de ilustraciones, páginas originales o portadas para las reediciones en tradepaperback, amén de artículos y entrevistas con los autores de estos comics. No podemos decir que todos hayan envejecido igual de bien pero son parte de la historia de la saga Aliens.

Reseña PANINI COMICS Aliens: La Etapa Original Tomo 1. Un ómnibus de tamaño colosal ha sido publicado por Jesús Salvador Gómez en Cinemascomics.com | Cine, cómics y series - Noticias de cine, series y cómics. Marvel, DC Comics, Star Wars, Netflix. Estrenos, tráilers...