Los seres humanos nos dividimos en dos grandes grupos: los que en momentos de angustia devoran como si no hubiese un mañana, y aquellos a los que se les cierra completamente el apetito cuando están mal. ¿Pero, por qué sucede eso? ¿Estamos genéticamente predeterminados a pertenecer a un bando o al otro? No es el ...