La Selección Argentina decepcionó a todos en su debut en el Mundial de Rusia 2018: el conjunto de Jorge Sampaoli apenas igualó 1 a 1 ante Islandia, y dejó muchas dudas en cuánto al funcionamiento del equipo y a la poca capacidad de abrir al rival que se metió atrás en muchos tramos del partido.

Si bien fue uno de los mejores jugadores del partido y el que más intentó buscar el arco rival, Lionel Messi tuvo en sus pies la oportunidad de ganar el partido y la desaprovechó fallando el penal a favor que tuvo Argentina. Un débil remate a la derecha del arquero, quien adivinó perfectamente la intención, no le permitió a la Pulga poder festejar una victoria.

Por esa razón, el crack rosarino hizo un mea culpa tras el partido y admitió su grado de culpa: “Me siento responsable por no habernos llevado los tres puntos. Haber convertido el penal nos hubiera dado tranquilidad. Estaba muerto después del penal. Pero, ahora, esto nos tiene que hacer más fuertes”, admitió.

Además, se tomó un tiempo para agradecerle a toda la gente que lo apoya: “Estuvo lleno de argentinos. Les quiero decir gracias por estar tanto hoy como todos los días que nos entrenamos”, cerró.