Este "truquito" es muy importante sobre todo para aplicarlo en servidores o en máquinas donde se acceda a recursos habitualmente. Configurando una IP fija, nos aseguramos que nuestra máquina va a estar siempre disponible con la dirección IP prefijada, y no cambiará por algún reinicio inesperado o por alguna causa. Si además hemos asignado un hostname a nuestra máquina, podremos seguir accediendo a ella en el caso que los servidores DNS fallen, ya que la IP seguirá siendo la misma. 

 Asignar una dirección IP fija a nuestro servidor o máquina, es bastante sencillo. Sólo tendremos que elegir una de las direcciones IP libres de la red, y asignársela a nuestra máquina en cuestión. Vamos a ver paso a paso cómo haríamos esto:

1) Lo primero de todo, ejecutamos la siguiente instrucción:

sudo nano /etc/network/interfaces

2) Ahora modificamos el contenido de la siguiente forma:

# This file describes the network interfaces available on your system 
# and how to activate them. For more information, see interfaces(5).
  
# The loopback network interface 
auto lo
iface lo inet loopback

# The primary network interface 
auto eth0  

# static IP 
# iface eth0 inet dhcp 
iface eth0 inet static 
address 192.168.1.13 
netmask 255.255.255.0 
network 192.168.1.0 
broadcast 192.168.1.255 
gateway 192.168.1.1 
dns-nameservers 8.8.8.8 8.8.4.4

Los servidores DNS 8.8.8.8 y 8.8.4.4 son los que utiliza Google, así que son válidos para todos.

3) Ahora abrimos resolv.conf 

sudo nano /etc/resolv.conf

4) Y lo modificamos añadiendo lo siguiente: 

nameserver 8.8.8.8
nameserver 8.8.4.4

5) Y por último, abrimos el fichero hosts

sudo nano /etc/hosts

6) Y lo modificamos de la siguiente manera:

192.168.1.13 pcname.mydomain.local pcname

7) Reiniciamos la tarjeta de red para que todos los cambios surtan efecto:

sudo ifdown eth0 && sudo ifup eth0

Y ya tendríamos nuestra máquina configurada con dirección IP estática.

Como siempre, si te ha sido de utilidad, no dejes a tus redes sociales sin conocer este magnífico truco ;)