De la segunda hacia la tercera para llegar a la primera. Parece un trabalenguas, pero es en realidad lo que está pasando en el fútbol profesional estadounidense.

La NASL -la liga de segunda división- parece estar encaminada a desaparecer en los próximos días o, en el ¿mejor? de los casos, tomarse una o dos temporadas para reformarse y volver a convocar a nuevos equipos para regresar a la competición.

La llegada inmediata de nuevos participantes o de grupos económicos que revivan las opciones de equipos como New York Cosmos o Fort Lauderdale Strikers son cada vez más débiles.

Al tiempo que estas mutaciones cobran forma hay equipos que se anticiparon a la actual situación y dejaron la North American Soccer League hace semanas con la intención de supervivir en la tercera división y -¿por qué no?- dar el salto a la MLS en el futuro.

Tampa Bay Rowdies busca su lugar en la primera división

Uno de los primeros en dar un portazo a la NASL este año fue el equipo de Tampa Bay Rowdies. Hace semanas el club del estado de Florida anunció que en 2017 jugará en la USL -por ahora la liga de tercera división- y, sin escalas, hace horas dio a conocer sus planes de expansión y búsqueda de una plaza en la Major League Soccer en el futuro cercano.

Tampa Bay juega como local en el histórico Al Lang Stadium -con capacidad para algo más de 7.200 espectadores- y el martes el equipo anunció su plan para ampliarlo para convertirlo en una infraestructura para 18.000 aficionados, cuyo ‘rendering’ fue presentado ayer (en la imagen).

Bill Edwards, presidente de los Rowdies, reveló también que mantiene conversaciones preliminares con la MLS y el comisionado Don Garber sobre la posibilidad de buscar una franquicia en expansión en el circuito de primera división en Estados Unidos.

Dan Courtemanche -número dos de la Major League Soccer- confirmó a través de un comunicado esos contactos. “La liga se ha reunido con Bill Edwards y está al corriente de la campaña que iniciaron los Rowdies para llevar a un equipo de la MLS al mercado de Tampa/St. Petersburg”.

“Existe una rica tradición de fútbol profesional en esa región desde hace más de 40 años y estamos impresionados con la visión [de Tampa Bay Rowdies] y sus planes para construir un estadio de clase mundial en la costanera de St. Petersburg”, agrega el documento de prensa.

El club, además, cuenta con el expreso respaldo del alcalde de St. Petersburg, Rick Kriseman.

Las incesantes demoras que sufre el proyecto de David Beckham en Miami sugieren que la MLS pueden estar abierta a analizar diferentes oportunidades en el estado de Florida. Los Rowdies -un equipo con tradición, con una masa de aficionados ya existente- podrían generar fácilmente una nueva rivalidad regional en la liga con Orlando. Menos de dos horas de viaje en coche separan a ambos mercados. Mientras la opción de Miami vive en nebulosa desde hace tiempo una hipotética llegada de Tampa Bay a la MLS cuenta con muchos aspectos que tendrían bastante lógica para la liga.

Carolina RailHawks cambia todo para postularse

Otro club de la NASL anunció el martes su intención de postularse para llegar a la MLS en el futuro. Carolina RailHawks cambiará de nombre, de colores y de escudo para comenzar a programar su candidatura.

El club pasará a llamarse con efecto inmediato North Carolina Football Club, y su ambición no se limita únicamente a la Major League Soccer. “Aspiramos a ser uno de los mejores equipos, tanto en el fútbol masculino como en el femenino”, explicó el propietario Stephen Malik. “Vamos a postular nuestra candidatura para entrar a la MLS y a la NWSL, así como para construir un nuevo estadio”, agregó. “Tomamos la decisión consciente de darnos a conocer como el club profesional de Carolina del Norte.”

Malik aseguró que su club lanzará una “campaña agresiva” para conseguir un equipo en expansión de la MLS en los próximos 12 o 18 meses. El equipo femenino podría estar en marcha en 2017. Además, la entidad busca un terreno donde poder construir un estadio específico con más de 20.000 asientos.

A la espera de una definición de la federación de Estados Unidos

Mientras esta súbita necesidad de expansión aparece en equipos que hasta hace pocos días militaban en la North American Soccer League (y quizás no sean los últimos en efectuar este tipo de anuncios) la federación estadounidense tiene que decidir qué hará con la pirámide integrada por las distintas ligas profesionales que coexisten en su sistema.

Mientras la MLS sigue siendo considerada como la primera división del fútbol masculino de Estados Unidos, la categorización de la segunda y tercera división está bajo debate. Si la NASL consigue salir con vida del éxodo masivo de equipos que experimenta desde hace semanas todo indica que tendrá complicado seguir siendo la D2. Parece poco probable que esta liga pueda presentar un mínimo de 8 clubes participantes y eso podría hacerle perder su actual situación.

La USL, en tanto, podría comenzar la temporada 2017 con cerca de 35 equipos. La liga -de la que participan muchos equipos filiales de franquicias de la MLS- cree que cuenta con todos los requisitos para dejar el tercer escalón de la pirámide para pasar a ser reconocida de manera oficial como la liga de segunda división.

La U.S. Soccer tenía previsto expedirse sobre este tema durante esta semana, pero la federación acaba de anunciar que postergará ese anuncio por unos diez días. Oficialmente la NASL no ha anunciado de manera oficial que cierra sus operaciones y eso -a nivel formal y reglamentario- podría estar complicando la resolución de este problema.

Por otro lado, si bien la United Soccer League se muestra abierta a incorporar a otros equipos deseosos de la NASL la puerta abierta no estaría abierta para todos los clubes que allí compiten. Las negociaciones se mantienen activas al momento de la publicación de este artículo.

Imagen: Tampa Bay Rowdies