Los odiados de Ayer envían remesas, reclamaciones para la reunificación familiar, medicinas, comida, ropa para los niños y juguetes. “¡Pim, pom, fuera, abajo la gusanera!”, los palos, las golpizas, los arrastres por los lodazales y el siempre mencionado huevazo contra el emigrante. Éste era el escenario en la década del 80 en una Cuba que politizaba el […]
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