La villa, a la sazón capital del reino, es un lugar extraño, sin otra identidad propia más allá del chotis y el cocido madrileño, es sin embargo, un vivero político fértil como un vergel y peligroso cual selva tropical.

En Madrid, el abono de los políticos no es otro que el cadáver de quien le precedió, ya que el poder se ve desde tan cerca en la capital, que la tentación es demasiado fuerte como para hacer prisioneros. Las luchas políticas con el adversario, pero muy especialmente con los de dentro, con los que se comparte partido y se compite por el puesto, se convierten en impúdicos espectáculos públicos, donde los periódicos hacen negocio.

Hoy en Madrid asistimos a una de esas orgías de depredación política, donde Zapatero cual Saturno devorando a su hijo, desea desprenderse de Tomas Gómez, quien ha sido la cara, la piel, el alma y el líder de los socialistas madrileños estos últimos 3 años.

La estructura federal del partido socialista agrava la situación, pues en teoría presentar Candidato no depende del secretario general (hoy también presidente del país) sino de los socialistas madrileños (PSM).

Pero Zapatero, sus asesores o Pepiño Blanco, saben que con este candidato con se puede ganar Madrid. Saben que con tipo cuyo mayor merito ha sido ser alcalde de Parla no es suficiente, saben que la sociedad madrileña no lo conoce lo suficiente, que no tiene notoriedad, saben que no ser diputado en la asamblea de Madrid le impide tener caras a caras con su rival la consolidadísima lideresa Esperanza.

Por el contrario opinan que la buenísima de Doña Trinidad Jiménez ex-concubina de González tiene más posibilidades http://bit.ly/dwz1kf y que el Secretario de Estado para el Deporte el señor Lizabesky, tampoco seria mal candidato para alcalde.

Los que parece que los asesores de Zapatero no saben, es que el gran ciclo político de Zapatero ha finalizado y que esos bonitos ojos azules son solo abono, abono para el Gallego, Parecen Desconocer que el mayor logro de la Jiménez es putear a los fumadores (como ella misma) y comprar 20 millones de inservible vacunas. Juegan a no reconocer que el merito de Lizabesky, es el fuerzo de otros, de nuestros deportistas mas concretamente, no les importa que con ese nombre nunca sea un candidato viable. Y sobre todo, parecen desconocer que hagan lo que hagan y presenten a quien presenten en esta coyuntura no ganaran nunca Madrid, ya sea ciudad o comunidad.

Algo huele mal, los números no salen, o el PSOE lo esta haciendo rematadamente mal o todo es una campaña de distanciamiento calculado del PSM, como por ejemplo cancelando reuniones con el Presidente, para colar a su candidato en una cantidad de portadas que de otra manera le estarían vetadas. ¿Estamos ante la campaña de Notoriedad mas esmerada de los últimos años o ante una chapuza comunicativa orden monumental? El tiempo dirá.