"Los contagios se están produciendo por el modo de vida que tiene nuestra inmigración" No es la primera y quizás no sea la última frase que exprese públicamente la presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ni siquiera para disimular los fracasos en la gestión de la pandemia que convierten a Madrid en el epicentro de un desastre anunciado y remolca a toda España a convertirse en el País con más contagios registrados en agosto al nivel de Bolivia, EEUU y el Brasil de Bolsonaro. Madrid está al borde del colapso. Sin embargo, Isabel Díaz Ayuso, sigue opinando que "Madrid esta de lujo" y no hay "meas culpas" ignorando incluso que la atención primaria sanitaria ya no funciona en su comunidad.

Madrid pone a España en los peores registros (118,9 x 1.000 habitantes). No hay ningún otro país europeo con peores datos. Le siguen Malta (80,9) y Rumanía (61,6) en la clasificación como países con transmisión  peligrosamente “alta” durante la escalada y todos están pendiente de su evolución futura.

Pizza y coca-cola en comedores de la educación pública y comida especial y barata exclusiva para hijos de la guardia civil y policía, más privatizaciones sobre la sanidad pública, subsidios a las corridas de toros, y gastos excesivos en fotos, publicaciones partidarias y cuestiones ajenas a la salud, son algunas de las torpezas de gestión de la señora Ayuso ante la graves crisis de la pandemia que arrastra a su socio de gobierno, Ignacio Aguado del partido Ciudadanos, a la sombra, irreverente e indiferente a lo que está sucediendo en Madrid, como si fuera realmente un "chichipio" a la orden.

Unas políticas por las que mayoría de la izquierda madrileña asume que no hay más salida que la moción de censura en una situación de emergencia como la actual a punto de ebullir sin retorno.

Iñigo Errejón, anunció en el Congreso que Más Madrid realizará una convocatoria a los partidos a una mesa para poner los mimbres a una moción de censura y tomará la iniciativa si el PSOE no lo hace. En tanto Gabilondo, más cauto, apela condicionado a la decisión que tome Ignacio Aguado del Partido Ciudadanos sobre el asunto. No obstante, ante la cruda realidad del aumento de la crisis, Gabilondo finalmente fue expeditivo dirigiéndose recientemente a la señora Ayuso: "Quienes se ensañan de verdad con usted y su gestión son los datos". "Su Gobierno lo que tenía que hacer era contratar personal adicional para la Salud Pública y reforzar los Centros de Salud. Y usted no lo ha hecho" y le ha pedido que deje de un lado "la obsesión mediática y el negacionismo de la realidad que le impide darse cuenta de la gravedad de la situación en la que nos encontramos".

En tanto la visagra de Ciudadanos con Ignacio Aguado, socios de Ayuso, muestra total irreverencia por lo que esta sucediendo sin proclamarse y son clave indispensable para que una moción de censura sustituya un gobierno inepto, ineficaz e indiferente al sufrimiento que está provocando la crisis ingobernable que recae en Madrid.

Aguado, en definitiva, sin definición sobre estos asuntos, está arrastrando a su formación naranja a ser parte del mayor descalabro político, social y sanitario de la región en la que subgobierna, meramente como un subordinado.