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Crónica WAM Festival 2017

Del 2 al 7 de mayo Murcia acogió entre sus brazos el nacimiento de un nuevo festival, el WAM, que además de conciertos en el recinto de La Fica y en diferentes plazas de la ciudad, contaba con actividades culturales, ocio y gastronomía. Pese a las dificultades con las que ha contado la organización, en poquísimo tiempo consiguieron montar un evento musical que tardará tiempo en olvidarse y eso ya se merece todos los respetos. Esta es la doble crónica o visión de dos de nuestros redactores (Javier Sierra y Juan A. Ruiz-Valdepeñas) durante estos días.

Mi WAM Festival por Javier Sierra

La procesión de conciertos empezó el miércoles 3 de mayo en la sala REM, la cual acogió una de las grandes sorpresas de la edición, los británicos Fat White Family. No hay que dejarse llevar por los prejuicios, aunque ya conocía los avisos sobre esta polémica banda en lo referido a letras, actuaciones y compostura en el escenario, me encaminé hacia su concierto con la intención de ser lo más objetivo posible. Todas las advertencias se quedaron cortas y sinceramente el concierto me impresionó, presentaron su último trabajo Songs for Ours Mothers, el cual suena muchísimo más descafeinado en formato digital que en directo. Son un auténtico torbellino encima del escenario, guitarras, teclados y saxofón cargados de efectos estridentes que se compensan con una batería marcada y los berridos perfectamente encajados de Lias Saoudi. Mi mayor sorpresa fue como pudieron mantenerse de pie e interpretar de esa manera tan salvaje las canciones con la borrachera que llevaban encima. Si te gustan el ruido bien hecho y los pogos Fat White Family es tu grupo. El día siguiente tocó una sesión de recuperación de tímpanos para poder ver y disfrutar en el Loft 113, de una delicia musical como es La Bien Querida. El espacio estaba abarrotado y el calor te tapaba las fosas nasales pero dejando a un lado eso, el concierto fue sensacional e íntimo, cosa que de vez en cuando apetece. A Veces Ni Eso, Poderes Extraños, Muero De Amor o  9.6 consiguieron que todo el mundo se abrazara, mandara audios a esas personas que ablandan el corazón o que lo hicieron en su tiempo y no menos importante, que cantaran entre lágrimas. Yo no soy de hielo y también caí. Gracias a La Bien Querida por hacer canciones así y conseguir que recuerde que no soy de piedra.

Viernes 5 de Mayo

Cuando me di cuenta ya era viernes y tocaba ponerme en marcha para ir al querido a la par que mítico recinto de La Fica, tenía una cita con Viva Suecia. La banda murciana está cosechando éxitos en cada escenario que pisa y sinceramente no me extraña, La Fuerza Mayor y Otros Principios Fundamentales son dos grandísimos trabajos que han conquistado a medio país, a eso hay que sumar, un directo potente y un himno consolidado como es Bien Por Ti y el WAM a sus pies. Fui a la barra a recargar fuerzas y después tocó ponerse en marcha para ver una de las mejores apuestas del festival, el señor Pablo Und Destruktion. Me quito el sombrero delante de este pedazo de artista y ante su último disco, una de las perlas musicales de lo que va de año, Predación. Me he dado cuenta de que es prácticamente imposible definir su directo, me dejó con la boca abierta de principio a fin y nunca me había pasado antes. Agradezco la lección que dio y espero no ser el único en aprender de lo que pasó ese día en el escenario Punta del Este desde las nueve menos cuarto hasta que acabó. Me recompuse como pude y me di cuenta de que era turno de ver a Future Islands, uno de los invitados internacionales del festival. Los bailes, los arrebatos y la voz de Samuel T. Herring son un auténtico espectáculo que consiguen que la banda sea una de las propuestas de synthpop más interesantes de los último años. Cada golpe que se daba en el pecho mientras interpretaba Seasons retumbaba en toda el recinto. Recuerdo que escuché entre canción y canción a una chica decirle a su amiga: “Tenías razón, son la jodida leche”. Sonreí y secundé la moción internamente. Pues lo que vino después no se quedó atrás, pero eso ya lo sabía. He podido ver a White Lies en diferentes ocasiones y en ninguna me han decepcionado. Qué gran directo y aunque han cambiado un poco de aires en su último trabajo, qué bien suena Friends al aire libre. No soy muy de hipotecar el futuro en este aspecto, pero a veces hay que hacer excepciones y me atrevo a decir que los vería una y mil veces más. Me despisté un momento y ya estaba Fangoria sobre el escenario, la gente cantando a grito pelado sus canciones y la fiesta montada. Poco más que añadir. Editors era la siguiente actuación y a mi juicio fue uno de los conciertos de la jornada. El conjunto británico liderado por Tom Smith tiene la fuerza y el magnetismo suficiente para convertir un lago calmado en un mar embravecido y viceversa. Esa capacidad de robustecer el ambiente con A Ton Of Love, Munich, Papillon o An End Has A Start, me quedé afónico de cantar como un condenado, pero cuando tocaron The Racing Rats fue el entierro definitivo de mis cuerdas vocales, pero me dio igual, fui jodidamente feliz en ese concierto. Acto seguido salieron al escenario Thunder Bitch el dúo de electrodisgusting/subnopop Ojete Calor. Era la primera vez que los veía por lo que iba sin una idea solida sobre lo que imaginar. Evidentemente puedes (o más bien quieres) imaginarte a lo que te enfrentas antes de un concierto de este calado: canciones chorra, una puesta en escena graciosa, mucha parafernalia y algún chistecillo, pues bien, eso es justo lo que encuentras. El megamix que hicieron es digno de reseñar, además de cantar hits de la talla de Ojete Calor, su tema homónimo, Tonta Gilipó, Viejoven, Qué Bien Tan Mal y mi favorita Cuidado Con El Cyborg. Si quieres echarte unas risas está claro que tienes que verlos. La jornada de viernes termino con The Magician, quien cerró el escenario Estrella Levante con una sesión que tocó diferentes palos de la electrónica, desde el Indiedace y el Nu-Disco hasta el Techno-House, todo el mundo despeinado y el WAM patas arriba. Sin duda, una de las actuaciones más destacables del viernes junto a Pablo Und Destruktion y Editors.

Sábado 6 de Mayo

El sábado tuve que madrugar, después de haber aguantado la primera jornada como un campeón, para ver a L.A y mereció el sufrimiento. Los mallorquines estrenaban por primera vez en Murcia su último álbum King Of Beast. Ese sonido Rock tan característico que les ha acompañado durante toda su carrera ha quedado intacto, cosa es jodidamente difícil mantener. Han progresado en la dirección correcta siendo fieles a su estilo, hecho que siempre hay que comentar. Helsinki, Stop The Clocks, Leave It All Behind o Hands estuvo entre lo más destacado del repertorio, dando una alegría a todos los que no les dio tiempo a memorizar las nuevas canciones y querían escuchar clásicos a la vez que ansiaban sentir como sonaba su nuevo trabajo en directo. Un ratito después me acerqué a ver a uno de los artistas más importantes e influyentes de este país, Sr. Chinarro. Hay dos facciones claramente definidas frente a esta banda, o te encanta o no te comes un concierto ni borracho. Adivinad donde me postulo yo. Interpretó temas incluidos El Progreso, como La Mujer o El Progreso, su última genialidad e hizo un repaso por su extensa discografía con canciones como Los Ángeles, Del Montón o su himno Una Llamada a La Acción. Más tarde tocaba ver a Orbital, un auténtico espectáculo de música electrónica y visuales. La hora era decente para disfrutar de su show en condiciones medio aceptables y tuve que parpadear varias veces para ver si estaba alucinando de manera natural o si me había pasado con la cerveza, pues sí, flipé. El techno estuvo más que bien representado. Más tarde el escenario Punta Del Este tuvo que apuntalarse y reforzarse para aguantar el directo de los cañeros Perro. La Vega Baja relució Rock y Punk con esta banda a partes iguales, tanto en el escenario como en los pogos que se montaron abajo. Ediciones Reptiliano, Marlotina o La Reina de Inglaterra hicieron lo suyo para que me volviera a quedar afónico el sábado, gracias Perro. Pasó algo de tiempo hasta que llegué al escenario Thunder Bitch para ver a Delorean, otra de las propuestas interesantes de este festival. Electrónica sutilmente combinada con Pop y Dance es su carta de presentación y si ya sobre el papel parece atractiva, cuando los ves en concierto sabes que son unos de los referentes del género y que sus conciertos son memorables. Para poner el broche de oro a la primera edición del WAM, aguanté otra vez hasta el cierre con Ley Dj, temazo tras temazo, salto tras salto y mis zapatillas en el tanatorio, poco más que decir. Espero de corazón, que la edición de 2018 sea, como mínimo, igual que esta.

Mi WAM Festival por Juan A. Ruiz-Valdepeñas

El pasado fin de semana del 5 y 6 de mayo procedía a la apertura de la ruta festivalera con la celebración del Wam Festival en Murcia. En los últimos tiempos siempre que asisto a un festival tengo la sensación que va a ser el último. Son diferentes los motivos que me llevan a esta reflexión, pero bien es cierto que, una vez que concluye el evento, vuelvo (al calor de un buen arroz a banda) sobre los momentos vividos, los conciertos oídos y los buenos ratos pasados y desecho por completo esa posibilidad. Despido con alegría el festival (gracias WAM) y saludo al próximo y deseado acontecimiento (hola Tomavistas). Entre tanto, esto fue lo que viví en Murcia y lo que no pude ver, lo completa con acierto y vigorosa primera persona mi compañero Javier Sierra.

Viernes 5 de Mayo

A las 18:25, tras una interesante previa en melómanos domicilios donde diferentes generaciones confluyen y disfrutan me encaminé al recinto de La Fica con rigurosa puntualidad para ver el concierto de Los Enemigos. A las 18:25h y con una poderosa canícula inundando la explanada, la veterana banda ofreció (una vez más) un noble concierto donde alterna temas de su legendario repertorio con las composiciones de su más reciente lanzamiento, Vida Inteligente. Sus temas son piezas de una inmensa banda sonora generacional que ilustran los momentos de cada uno y eso es lo que ofrecen, con notable ejecución, en cada uno de sus conciertos. Tras la cancelación de Sidonie llegó el turno de Viva Suecia que tan bien ha relatado mi compañero, así que turno ahora para los granadinos Niños Mutantes, quienes demuestran en cada concierto la exuberante vitalidad que transmiten. Sus canciones tienen un poso árido, reflexivo y en ocasiones confuso, pero su ejecución en directo resulta sobresaliente, contagiosa y excitante.

Tras diferentes avatares, encuentros y desencuentros pasan los conciertos hasta llegar a Belako, quienes dieron una muestra de fiereza eléctrica que va ganando en potencia, solemnidad y empuje según avanzan sus actuaciones. Un concierto de alto copete, donde descarga tras descarga galvanizan a una audiencia necesitada de un grupo como ellos.

Sábado 6 de Mayo

La segunda jornada del WAM comienza con un desayuno contundente y con la vista puesta en la reconfortante y reconstituyente comida en un lugar emblemático de la capital: El Garrampón. Local de incuestionable calidad y necesaria cantidad para lo que se presumía una jornada exigente en el recinto de La Fica. Como paso previo, un descubrimiento: “El Rincón de Paco” en el Mercado de Abastos Saavedra Fajardo. Un lugar excepcional, de trato exquisito donde, además de prepararte a la plancha el género que compras en los puestos propios del mercado, degustamos un delicioso “pulpo rockero” y una empanadilla de carne extra picante; todo ello bien regado con vino de la tierra y cervezas bien bien frescas. Bueno, que me pierdo. Tras todo esto y la comida en el Garrampón (y su necesaria sobremesa), vuelvo a encaminar mis pasos hacia La Fica.

Una vez allí, empiezo con L.A. (a la crónica de Javi me remito) y continuo con La Habitación Roja, grupo que, al igual que Los Enemigos, forma parte de mi banda sonora vital. Cada vez que empiezan sus conciertos un reguero incontrolable de emociones avasallan a los presentes. Su sólido y enérgico repertorio son una buena muestra de cómo una banda puede desarrollar una carrera tan interesante en sus más de veinte años de trayectoria. Tras estos y con la subida creada por el set de TodoIndie Dj Set, encamino mis pasos y, sobre todo, mis ganas, al concierto de Lori Meyers. Admito que mantengo una relación ambivalente con ellos, pero tras el concierto de este festival he vuelto a caer de su parte. Una selección de temas en las que sonaron bastantes de su último lanzamiento (algo por lo que Noni llegó hasta pedir disculpas) que hizo delirar al público (de hecho cuando sonó al final del concierto “Pierdo el control”, eso es lo que pasó literalmente) de principio a fin. Un concierto magno, épico, con una exquisito y cardíaco orden en su setlist que se vio acompañado de unas refulgentes y enaltecedoras proyecciones que fluyeron de forma orgánica a través de temas clásicos y nuevas composiciones, logrando un grandísimo concierto culminado con un tema maravilloso que ronda mi cabeza dede entonces (Hilo de seda de Los Pekenikes). Enhorabuena. Varry Brava, siguió con su particular safari. Un espectáculo de notable solvencia y épica sonoridad que puso (más patas arriba) al público que venía del concierto de Lori Meyers.

La jornada continuaba, los grupos se sucedían (lean a Javier Sierra), Trentemoller hizo de las suyas en un concierto de muchos y variados matices que seguía percutiendo en los oídos de un público que quería más y más. No quería fin, ni yo tampoco, así que extiendes la jornada, ves a unos y a otros, vas y vienes y, cierras y te vas. Despiertas, reflexionas y te das cuenta que, una vez más, ha merecido la pena.

Redacción: Juan A. Ruiz-Valdepeñas/Javi Sierra

Fotos: Diego Montana

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