Aunque parece más bien una frase con fines superlativos ("es para morirte de la risa") y si bien no es mortal, existen varias patologías relacionadas con la hilaridad. Entre las primeras se encuentran las risas que resultan de Problemas neurológicos, como hemiplejías y daños en la corteza cerebral, así como las convulsiones y la propia de los retrasados mentales o dementes. En la segunda clase se cuentan los problemas emotivos, como la desasociada de algunos estados de ánimo, o sea, reír sin control frente a acontecimientos tristes o preocupantes, o no parar de reír de cualquier tontería. En la tercera categoría se menciona a la absurda, que procede de procesos intelectuales, aunados a alucinaciones, obsesiones y delirios. En el caso de algunos problemas neurológicos mortales, puede presentarse como un síntoma asociado.