El escándalo de Cambridge Analytica ha puesto nuevamente en entre dicho el uso que hacen las principales empresas con nuestros datos. Mientras que Apple siempre se ha vanagloriado de no hacer uso de nuestros datos (ni venderlos o utilizarlos para mejorar sus servicios como hace Google) tanto Google como Facebook los utilizan para orientar su plataforma de anuncios.

Si bien es cierto que Google no vende nuestros datos a terceros, además de no permitir el acceso a terceros, si los utiliza para vender su plataforma de anuncios, de forma que los anunciantes pueden orientar sus anuncios a mujeres de entre 30-40 años, con hijos y que les gusten los deportes, por poner un ejemplo para que se entienda.

Pero algunas empresas, como Toyota, parece que no quieren leer más allá de los titulares y han anunciado que no tienen previsto utilizar Android Auto en sus vehículos, debido al riesgo en la privacidad que supone. Hace un par de años, Porsche anunció la misma decisión, debido al gran número de datos que recogía durante los trayectos que realizaba el propietario. Pero al igual que con los datos que recopila Google sobre nuestra navegación, estos se utilizan para mejorar la calidad del servicio que nos ofrece el gigante de las búsquedas.

Toyota ha rechazado implementar estos últimos años tanto Android Auto como CarPlay, pero parece que finalmente se ha dado cuenta de que los usuarios demandan este tipo de sistemas. Si tienes pensado comprar un Toyota, puede que este único aspecto sea más que suficiente como para no tenerlo en cuenta en tu decisión de compra final.

Android Auto, al igual que CarPlay de Apple, nos permite interactuar con parte del contenido del dispositivo como si de  un smartphone integrado en el coche se tratara, por lo que se convierte en una excelente herramienta para evitar distracciones al volante. No será hasta el año que viene, cuando Toyota comience a implementar CarPlay en sus próximos modelos, además de seguir apostando por su propia plataforma SmartDeviceLink.