Son verdaderamente molestas y pueden aparecer por muchas razones. Las llagas en la lengua pueden ser debidas a virus o problemas de higiene bucodental, pero en la mayoría de casos son la consecuencia de alguna quemadura. Al comer algo a una temperatura demasiado alta y entrar en contacto con nuestras sensibles papilas, esto provoca una quemadura importante en la lengua. También pueden ser debidas a mordeduras accidentales, quemaduras por el tabaco o incluso deficiencia de vitamina B12. 

Por suerte, existen remedios muy útiles para contrarestar esas llagas.

• Bicarbonato en agua hervida, para sanar las posibles heridas y que la zona no esté tan sensible.
• Cubito de hielo sobre la lengua. Produce un frío intenso que hace que la herida se entumezca y reduce el dolor. Recomendable sobre todo al aparecer la llaga.
• Manzanilla, como infusión perfecta con agentes antinflamatorios y analgésicos. Conviene hacer gárgaras con ella.
• Enjuague bucal casero a base de agua caliente, sal y limón, para que la herida no vaya a más y se cierre cuanto antes.