Está mi infancia en esta Costa, bajo el Cielo tan alto, cielo como ninguno, cielo, sombra veloz, nubes de espanto, oscuro torbellino de alas, azules casas en el horizonte. Junto a la gran morada sin ventanas, junto a las vacas ciegas, junto al turbio licor y al pájaro carnívoro. ¡Oh, mar de todos los días, mar montaña, boca lluviosa de la costa fría! Allí