Es muy difícil no querer a Mamoru Hosoda, muy, muy difícil, sólo mirando sus obras después de su rocambolesca huida del estudio Ghibli , no puedes hacer otra cosa que quitarte el sombrero por su capacidad de afrontar temas sencillos y cotidianos y convertirlos en maravillas. Crear universos que siempre giran en torno a lo fantástico y afrontarlos con mimo, ternura y una visión increíble. Mirai, mi hermana pequeña se unen a El niño y la bestia,...
Continua leyendo más en el blog...
This post first appeared on EL LADO OSCURO DEL CELULOIDE - El Cine Desde Un Pu, please read the originial post: here