Si estás pensando en Invertir y poner a crecer tu dinero sin que tú tengas que hacer nada, es una buena idea. Hoy en día hay muchas maneras de invertir y no necesitas leer un tratado de negocios completo sobre inversión en bolsa y todo eso que parece muy complicado al principio.

Existe una nueva forma de inversión que ha estado en boca de todos los expertos en los últimos años, y se trata de ese sistema que realmente ha revolucionado nuestra economía y que ha cuestionado lo que pensábamos de las formas de pago: las criptomonedas. ¿Te interesa saberlo? ¡Sigue leyendo!

Bueno, una ICO tiene que ver todo con las criptomonedas, respondiendo a esa pregunta. Es cierto que estas monedas en sí son una forma de inversión, ya que puedes comprar algunas, esperar a que suban de valor y luego venderlas, pero esto va un poco más allá.

Para que entres en contexto con todo esto, debes conocer el funcionamiento de las criptomonedas. Estas están, como su término bien lo dice, encriptadas en bloques, que se liberan minando. No del tipo de picos y palas, sino con computadoras y máquinas. 

Estos bloques se encuentran en un ecosistema, lo cual es bastante difícil y complicado de crear. Por eso, se recurren a herramientas como las ICOs, que permiten financiar la creación de estos softwares sin que los desarrolladores tengan que hipotecar sus hogares.

¿Y qué significa el término “ICO”? Son las primeras letras de cada palabra del término en inglés, que es Initial Coin Offering. Una traducción acertada puede ser Oferta Inicial de Moneda.

No es nada del otro mundo. Existen muchas páginas que muestran toda una gama de ICOs, de donde puedes elegir las que más se adapten a ti (sí, puedes invertir en varias a la vez ya que no necesitas tener una fortuna reservada para cada una).

El proceso va así: los desarrolladores crean el proyecto y hacen el esbozo completo, hablando de sus objetivos, todo el ecosistema y el personal que está implicado, entre muchos otros datos. Estos deben estar reflejados en el Libro Blanco o whitepaper. Si no, te lo digo de una vez: no inviertas en esa ICO.

Entonces presentan el proyecto e invitan a las personas a comprar sus tokens incluso antes de que estén listos, ya que les hace falta dinero para esto. Esta 

es la oferta inicial de la moneda, a la que se le pone un precio fijo. Incluso hay varias etapas, está la PreICO, donde puedes adquirir las monedas a un precio menor, por ejemplo.

En el caso de que decidas invertir en una ICO, ten en cuenta que debes hacerlo con otras criptomonedas, que por lo general son de Ethereum. Así que asegúrate de poseer una billetera virtual y conocer sitios donde puedas adquirirlas. Harás el depósito en su plataforma, y luego a esperar los resultados de la ICO.

¿Por qué? Porque todo dependerá del éxito (o el fracaso) de la misma. Si la ICO logra el objetivo planteado, tú recibirás tus tokens. Si, por el contrario, no alcanza el dinero mínimo requerido, te devolverán las monedas que depositaste y nada habrá sucedido.

Lo bueno de estas inversiones es que Puedes Apoyar una situación que te interese y por la que te preocupes. El objetivo de todo ecosistema de blockchain debe ser el de solucionar dificultades o problemas que se puedan presentar en cualquier área.

Por eso, si tú eres un amante de la salud, puedes invertir en ICOs como Simply Vital Health, cuyo fin es crear relaciones más directas y fáciles entre productores, distribuidores y clientes de medicinas e insumos médicos.

¿No te interesa la salud pero eres un aficionado al arte? Existe Opus, un proyecto para vender tus propias producciones musicales sin intermediarios y obtener el 100% de las ganancias. Incluso si tú mismo no eres músico, puedes ayudar a artistas independientes y de alguna forma mejorar la industria musical.

Dejaré una pequeña lista de algunas de las categorías de ICOs que existen y en las que puedes invertir:

Y mucho más. Así que no tienes excusa, porque puedes apoyar algo que realmente te interesa, hacer algo por este mundo y, al mismo tiempo, ganar dinero. No lo pienses más y ¡atrévete!