Ayer fue un día bastante intenso. Dormí mucho en la tarde y por eso ahora estoy despierto, bien despierto y orando (he descubierto que es mejor no luchar con mis padrones del sueño, sino mas bien usarlos efectivamente). Quiero compartir algo de lo que me sucedió Ayer, dado que provee una visión de esta etapa de mi viaje con el Señor.
Ayer por la tarde fui al Box Hill Hospital para realizarme otro CT escaneo, y luego mas tarde corté un ayuno de cinco horas (las requeridas para el escáner) con una bebida nutricional especial que yo quería probar. Esta bebida era un alimento líquido PRE-digestión usada por pacientes geriátricos que tienen problemas para digerir sus comidas - OK, no bromas de geriátricos, por favor:-)
No se que pasó, pero tuve una severa reacción adversa a esta bebida. En los minutos en que estaba bebiendo esta alimento líquido, comencé a sentir fiebre. En otros diez minutos, comencéa tener agudos dolores (similar al envenenamiento por alimentos). Yo he sufrido el envenenamiento por alimentos anteriormente, y este fue el episodio más doloroso que alguna vez tuve, casi al punto de morir. Mientras Elena me estaba llevando a casa, tuvimos que parar mientras yo vomitaba al costado de la calle. Al principio eran arcadas principalmente, pero entonces vomitéuna sustancia que probablemente era 30% comida y 70% ácidos estomacales, amarillo brillante, como azufre. Llegamos a casa y me acosté, experimentando punzada tras punzada, un dolor agonizante. Elena estaba orando por mí y también llamamos a mis padres quienes se unieron a nosotros en oración. Después de unos 40 minutos, el dolor comenzó a irse, dejándome exhausto obviamente.
Este fue un espantoso episodio en muchas maneras, particularmente para Elena, ya que fue la primera vez, que la seria naturaleza de mi condición, realmente ha mostrado su despreciable cabeza.
Lo que quiero compartir particularmente en este momento, no obstante, es como esta experiencia se ajusta a todo lo que les estaba compartiendo ayer. Puedes recordar que en un post previo les confié algunos de mis miedos, los cuales el Señor ha estado ayudándome a enfrentar y a vencer. El primero de esos miedos era el miedo al dolor.
Aquí hay una cita sobre mi post; "Enfrentando el Miedo":
Así que la experiencia de ayer fue un punto de crecimiento real para mí. Ahora sé que Dios es fiel a su palabra en esta que es mi área más importante en cuanto al miedo, y de esta manera, tengo total fe para el futuro. Soy verdaderamente mas que un vencedor en esta área debido, no sólo a que tengo fe en que Dios me va a rescatar y a sanar, sino que también sé, que si aun necesito pasar a través del sufrimiento del dolor, la gracia de Dios también va a estar ahí para mí.
En efecto, yo aprendí ayer que el miedo al dolor no me tiene mas cautivo. ¡Alabado sea el Señor! Y este episodio me ayuda aun mas a poner en contraste lo maravilloso de la sanidad que ya está en camino y se cumplirá en mi vida. Y también subraya la naturaleza de mi caminar con el Señor.
Puedes recordar que ayer escribí como al comienzo del día, el Señor me había preparado para el día con su palabra (ver el post de ayer, "Mi Pan Diario"). Él me ha dado algunas promesas en la escritura, de los cuales dos en particular ahora suenan fuerte. Isaías 43:1-2 dice:
La otra escritura de relevancia se encuentra en Isaías 41:10,13:
Lo que extraje de mí experiencia de ayer en la tarde fue un claro entendimiento de que la presencia de Dios hace toda la diferencia durante el tiempo de dolor. Él me sostuvo con su mano derecha. Él me tomó por mi mano derecha y me dijo, no temas; yo te voy a ayudar. Y que diferencia que hace. Yo he sido testigo de la gracia de Dios en acción en una manera muy práctica.
Ayer por la tarde fui al Box Hill Hospital para realizarme otro CT escaneo, y luego mas tarde corté un ayuno de cinco horas (las requeridas para el escáner) con una bebida nutricional especial que yo quería probar. Esta bebida era un alimento líquido PRE-digestión usada por pacientes geriátricos que tienen problemas para digerir sus comidas - OK, no bromas de geriátricos, por favor:-)
No se que pasó, pero tuve una severa reacción adversa a esta bebida. En los minutos en que estaba bebiendo esta alimento líquido, comencé a sentir fiebre. En otros diez minutos, comencéa tener agudos dolores (similar al envenenamiento por alimentos). Yo he sufrido el envenenamiento por alimentos anteriormente, y este fue el episodio más doloroso que alguna vez tuve, casi al punto de morir. Mientras Elena me estaba llevando a casa, tuvimos que parar mientras yo vomitaba al costado de la calle. Al principio eran arcadas principalmente, pero entonces vomitéuna sustancia que probablemente era 30% comida y 70% ácidos estomacales, amarillo brillante, como azufre. Llegamos a casa y me acosté, experimentando punzada tras punzada, un dolor agonizante. Elena estaba orando por mí y también llamamos a mis padres quienes se unieron a nosotros en oración. Después de unos 40 minutos, el dolor comenzó a irse, dejándome exhausto obviamente.
Este fue un espantoso episodio en muchas maneras, particularmente para Elena, ya que fue la primera vez, que la seria naturaleza de mi condición, realmente ha mostrado su despreciable cabeza.
Lo que quiero compartir particularmente en este momento, no obstante, es como esta experiencia se ajusta a todo lo que les estaba compartiendo ayer. Puedes recordar que en un post previo les confié algunos de mis miedos, los cuales el Señor ha estado ayudándome a enfrentar y a vencer. El primero de esos miedos era el miedo al dolor.
Aquí hay una cita sobre mi post; "Enfrentando el Miedo":
A pesar de que el encuentro de ayer con el dolor fue en la categoría de "no quiero pasar otra vez por el", también sirvió para probar algo a mí. No tengo nada que temer de ningún dolor que puedatener en el futuro. Aun en medio del peor dolor, tengo un claro sentido de la presencia del Señor. Como ya he dicho en el post de ayer, mi fe es 1) que Dios "estará ahí para mí, cuando experimente dolor y que él puede sanarme", y 2) que la presencia de Dios "va a estar conmigo, aun durante los tiempos de sufrimiento". Puedo testificar, que esto fue verdad para mí ayer."He experimentado un dolor intenso y sostenido en el pasado, y debo decir que a pesar que no es el mayor miedo para mí, el miedo del dolor es aun un factor que debo enfrentar. Pero nuevamente, fe, esperanza y amor han sido los antídotos para este miedo. Tengo fe en que Dios estará ahí para mí, cuando experimente dolor y que él puede sanarme. Tengo la esperanza de que si aún tengo que enfrentar el dolor, Dios me llevará a una victoria completa. Y tengo amor, un conocimiento seguro de que la presencia de Dios va a estar conmigo, aun durante los tiempos de sufrimiento."
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Así que la experiencia de ayer fue un punto de crecimiento real para mí. Ahora sé que Dios es fiel a su palabra en esta que es mi área más importante en cuanto al miedo, y de esta manera, tengo total fe para el futuro. Soy verdaderamente mas que un vencedor en esta área debido, no sólo a que tengo fe en que Dios me va a rescatar y a sanar, sino que también sé, que si aun necesito pasar a través del sufrimiento del dolor, la gracia de Dios también va a estar ahí para mí.
En efecto, yo aprendí ayer que el miedo al dolor no me tiene mas cautivo. ¡Alabado sea el Señor! Y este episodio me ayuda aun mas a poner en contraste lo maravilloso de la sanidad que ya está en camino y se cumplirá en mi vida. Y también subraya la naturaleza de mi caminar con el Señor.
Puedes recordar que ayer escribí como al comienzo del día, el Señor me había preparado para el día con su palabra (ver el post de ayer, "Mi Pan Diario"). Él me ha dado algunas promesas en la escritura, de los cuales dos en particular ahora suenan fuerte. Isaías 43:1-2 dice:
"Pero ahora, así dice el Señor, el que te creó, Jacob, el que te formó, Israel: «No temas, que yo te he redimido; te he llamado por tu *nombre; tú eres mío. Cuando Cruces las aguas, yo estaré contigo; cuando cruces los ríos, no te cubrirán sus aguas; cuando camines por el fuego, no te quemarás ni te abrasarán las llamas."¿No es sorprendente como al comienzo del día no sabes que hay para ti mas tarde en el día, y aun el Señor puede prepararte totalmente para lo que va a venir? Justo al comienzo del día, y tuve la promesa del Señor; "cuando cruces las aguas, yo estaré contigo; cuando cruces los ríos, no te cubrirán sus aguas" y que "cuando camines por el fuego, no te quemarás..." ¡Y esa fue mí experiencia! Yo sabía muy poco al comienzo del día que iba a estar pasando a través del fuego del dolor, y que pudiera experimentar la casi sobrecogedora inundación de agonía física. Aun así, ¡pasé a través, con un claro sentido de la presencia del Señor!
La otra escritura de relevancia se encuentra en Isaías 41:10,13:
"Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa...Porque yo soy el Señor, tu Dios, que sostiene tu mano derecha; yo soy quien te dice: No temas, yo te ayudaré."
Lo que extraje de mí experiencia de ayer en la tarde fue un claro entendimiento de que la presencia de Dios hace toda la diferencia durante el tiempo de dolor. Él me sostuvo con su mano derecha. Él me tomó por mi mano derecha y me dijo, no temas; yo te voy a ayudar. Y que diferencia que hace. Yo he sido testigo de la gracia de Dios en acción en una manera muy práctica.
