Es una composición litúrgico-musical que precede en algunos casos al «alleluia». Nació en el Siglo V, cuando comenzó a amplificarse musicalmente la a final del «alleluia». Por su carácter festivo, estas amplificaciones se denominaron júbilos. Posteriormente, en el siglo IX, comenzaron a llamarse secuencias, por ser una continuación del «alleluia». En el siglo VII se las dotó de letra