He querido tocarte tantas veces, pero solo permaneces oculta entre las sombras del pasado. Tu silueta tentadora me engaña cuando veo en los rincones, recordando esos momentos que compartimos y que nunca más volvieron.
Quisiera que no fueras solo un recuerdo, sino que sea la mujer real que una vez me enamoró y que me dio tantas sonrisas que ahora solo han quedado extintas en algún lugar de nuestras vida.