Durante todo el año 2018, mi lista de propósitos ecológicos me llevaron a repensar muchas cosas

Me di cuenta que sin tanto esfuerzo – como al principio pareciera – cambié muchas cosas que creí imposibles. En muchos casos seguramente pensaron que estaba loco. Como cuando en una de estas cafeterías de la sirena pedí los cafés para todos en taza en lugar de vasos desechables. A veces somos nosotros quienes tenemos que propiciar el cambio de mentalidad en Otros.

Pensando en ello, armé mi lista de propósitos de #Año2019, como una continuación y mejora de ideas de la lista del año pasado:

1. No más plásticos. Este es un propósito que no cambia mucho. Me sigue aterrando ver que todo lo que nos rodea está lleno de plástico. La comida, los objetos, todo y no estamos haciendo nada más con este plástico para reutilizarlo.

2. Re-Utilizar. Me doy cuenta que todo el tiempo compramos cosas para usar una o dos veces y luego las arrumbamos, cosas que podrían servir a otros si tan solo les diéramos la oportunidad. Recordemos: “La basura de unos es tesoro de otros”

3. Ahorrar energía eléctrica, buscar otras fuentes de energía. Desde cambiar nuestros focos a led, hasta apagar la luz de los espacios que no estamos utilizando. Creo que no nos vamos a cansar de decirlo. Además para mí con Global Solare es una misión ayudar a otros a ahorrar energía y utilizar energías limpias.

4. Ser Ecologista. Ser y vivir como ecologista como parte de mi filosofía y estilo de vida.

5. Tener una planta comestible en casa y cuidarla sin que se muera, hasta cultivar sus frutos. Tener una planta en casa a la que se le procure para comer como la albahaca o un arbusto de chile es un reto bastante interesante, nos enseña el valor de la comida y de los seres vivos.

6. Comprar menos. De los más difíciles, pero también de los más benéficos. Comprar Menos nos, hace que las inversiones que hagamos sean más inteligentes.

7. Caminar más. Usar menos el carro nos ayuda no solo a contaminar menos o a que haya menos tráfico. Si no también es muy saludable.

8. Seguir comprando local. Las compras locales generan menos impacto ambiental, y reactivan la economía de las comunidades.

9. Seguir sin pedir popotes, y ahora tampoco pedir la tapa. O incluso tampoco pedir vasos desechables. Vamos por el siguiente nivel. No contaminemos.

10. Llevar mis bolsas para cualquier compra que haga. Llevar una bolsa reutilizable en el auto o en la mochila, siempre será el aliado en estos casos.

11. Ser más amigable con mi entorno. Apreciarlo, cuidarlo, amarlo, prestarle atención.

12. Invitar a alguien más que cuide el medio ambiente. Compartir la filosofía, y enseñar a quién quiere aprender siempre beneficia al ambiente y a la convivencia con otros.

Este año también reflexioné en mi blog de muchas situaciones que damos por hecho, como la calidad del aire o del agua en Guadalajara. O de cómo olvidamos que ciertas comunidades indígenas o de mujeres en nuestro país son las que están cuidando más y mejor el medio ambiente.

Creo que si todos tuviéramos aunque sea un propósito ecológico en nuestras listas anuales podríamos hacer cambios. ¿Tú qué opinas? ¿Qué propósito ecológico incluiste tú para este #Año2019? Charlemos en Instagram de esto https://www.instagram.com/humberto_cebada/