Existe un personaje caricaturesco y de conductas previsibles que va por el mundo tratando de mostrar la imagen de un trasnochado escritor que mata sus neuronas entre etílicos y opiáceos nocturnos. Estos personajes suelen tener el ego más inflado que el cuerpo de un rubicundo sapo mientras que, con elocuencia estudiada, alardean una alharaca de […]
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