Nahid (Sareh Bayat) es un mujer del norte de Irán. Nahid es madre, divorciada, trabaja para sustentar a duras penas su pequeño apartamento en el que vive con su hijo. Tiene un acuerdo con ex marido, del que se divorció a causa de la drogacción de este, por el cual mantiene la custodia de su hijo mientras no se vuelva a casar. Pero Nahid se ha vuelto a enamorar, con la incertidumbre de poder verse en la circunstancia de tener que elegir entre su nuevo amor y su hijo. Una desapacible orilla del mar Caspio donde se encuentran Nahid y Masoud (Pejman Bazeghi) será el lugar clandestino donde construir esta nueva y frágil relación. Buscan una solución desesperada a la desesperada situación: casarse temporalmente, para sortear el acuerdo de divorcio de Nahid y mantener la custodia de su hijo. Aunque no todo se soluciona tan fácilmente.

El matrimonio temporal o matrimonio por tiempo limitado es un tipo de matrimonio poco usado en los países musulmanes pero igualmente legal. Se trata de un matrimonio exactamente al tradicional pero con dos diferencias: primero, se establece un límite temporal en la duración del matrimonio, que se puede ir prorrogando o finalizar sin necesidad de divorcio, y segundo, que no hay obligatoriedad legal de sustentar a la esposa. Es una institución de larga tradición, sobre todo en los países de mayoría chiíta (como Irán o Irak) aunque se ha expandido también a determinados países sunníes (especialmente Arabia Saudí, Emiratos o Kuwait). Pero que sea tradicional no quita que esté exento de polémica, debido a que socialmente está estigmatizado, incluso es visto como prostitución encubierta legalizada. En realidad, este pequeño resurgir de una institución que debería haberse extinguido por el paso del tiempo es debido a la dificultad en la normalidad en las relaciones hombre-mujer en los países árabes. El patriarcado (con sus avances, también ha habido cambios) sigue siendo una realidad palpable y como el caso de Nahid se buscan soluciones imaginativas. Y si bien el rechazo social a la relaciones prematrimoniales hacen de estos matrimonios una salida para algunos, también se pueden convertir en una legalización de situaciones inhumanas como el matrimonio infantil, donde la mujer es vista como mercancía en un vulgar trato.